Se lanza al mar con una furgoneta robada y pide que lo dejen allí

Las fuerzas de seguridad investigan lo sucedido esta tarde en el puerto de O Grove, donde una furgoneta comercial, pertenciente a una distribuidora farmaceutica, y parece que previamente robada, se precipitó al vacío desde la punta del muelle.

Lo más llamativo es que el protagonista de estos hechos, un vecino nacido en 1984 en el Ayuntamiento de Brión –a medio camino entre Santiago y Noia–, llegó a O Grove en su propio coche, que está a nombre de la madre.

Está grabado

La Policía Local ha confirmado que se le ve en unas cámaras de seguridad estacionándolo mal en la calle Luis A. Mestre y observando de cerca la furgoneta que acabaría robando.

Cuando la conductora entró a la farmacia, este hombre cerró la puerta lateral de la furgoneta de reparto y se la llevó, dirigiéndose inicialmente al muelle de Porto Meloxo, donde parece que no lo vio claro, ya que no hay tanto margen para coger carrerilla y “hacer volar” el vehículo.

Razón por la que dio media vuelta y se desplazó al puerto pesquero de O Corgo, enclavado en el centro urbano de O Grove, donde tuvieron lugar los hechos.

Tras caer al mar, el vehículo acabó a la deriva, siendo arrastrado unos cuarenta metros por la fuerte corriente, hasta que se hundió por completo.

Velocidad "exagerada"

Alegan los testigos y los servicios de emergencias que el conductor atravesó el viejo muelle de un extremo a otro, desde la plaza de O Corgo hasta su punto final, a una velocidad que cifran en “alrededor de 120 o 150 kilómetros por hora”.

Aunque no tienen forma de concretarlo aseguran que “era una velocidad exageradamente alta” y que “en ningún momento detuvo la marcha”, por lo que se habría arrojado al mar intencionadamente.

Barcos pesqueros

Inmediatamente acudieron varios barcos pesqueros que regresaban a puerto para hacer sus descargas en lonja, y cuando trataron de auxiliar al conductor, éste les pidió que se fueran y lo dejaran allí.

Finalmente los pescadores consiguieron sacarlo y llevarlo a tierra firme, no sin que el conductor tratara de oponerse y se enfadara considerablemente, insistiendo en que quería quedarse en el mar.

En el muelle esperaban tanto efectivos de la Policía Local como Emergencias O Grove y una ambulancia del 061, que trasladó al herido a un centro médico.