Alberto Varela, el alcalde socialista de Vilagarcía, rebosaba felicidad y orgullo cuando ayer se le pedía desde FARO DE VIGO que hiciera un primer balance de las fiestas de San Roque; una cita de Interés Turístico Nacional que se despedía con el tradicional “Desfile de Carrozas”, después de haber superado, en la noche del sábado, el no menos popular y multitudinario “Combate Naval”.
Visiblemente satisfecho, el regidor presumía de haber podido asistir, como el grueso de los vilagarcianos, buena parte de los arousanos y una notable cantidad de turistas, a “una celebración típicamente nuestra y especialmente emotiva”.
Una esperada fiesta que, “respondió a las expectativas y supuso un brillante regreso a esa normalidad que todos anhelábamos con tanta fuerza, tras haber superado dos años de pandemia que truncaron nuestro día a día y, con ello, nuestras costumbres y tradiciones”.
Todo ello, aspectos que “pudimos recuperar y celebrar por todo lo alto –añade el alcalde–, de ahí que mi valoración, como no podía ser de otra manera, sea altamente positiva”.
"Ambiente familiar"
Máxime cuando “tanto los vecinos como aquellos que nos visitaron pudimos respirar más que nunca un ambiente familiar, muy de amigos y, en definitiva, muy vilagarciano”.
De este modo, acordándose de cuantos padecieron el COVID y se perdieron este regreso de la fiesta del patrón, sacando a relucir el “orgullo vilagarciano” y tildando San Roque 2022 como un evento tan “histórico” como “emotivo” y “familiar”, Varela no solo se refiere al “Desfile de Carrozas”, celebrado ayer, y al “Combate Naval” de la noche previa.
También habla de la Festa da Auga, de las verbenas y del “Festaclown”, sin olvidarse de los pasacalles con música folclórica y con la Banda de Música Municipal de Vilagarcía, la exposición retrospectiva sobre la Festa da Auga y tantas otras actividades puestas en marcha desde que el 23 de julio se desplegó una madrugadora e igual de exitosa “Noite das Meigas”.
La fiesta respondió a las expectativas y supuso un brillante regreso a esa normalidad que todos anhelábamos con tanta fuerza, tras haber superado dos años de pandemia que truncaron nuestro día a día
Parece que pasó ya una eternidad, y de hecho, “fueron tantas, y tan variadas, las actividades llevadas a cabo, que tras un mes de fiesta es casi imposible acordarse de ellas una a una –asume el máximo mandatario vilagarciano–, pero sí puedo asegurar que en todas se vivió un ambiente formidable, cada una con su estilo y su público”.
Sabedor de que las condiciones meteorológicas también jugaron a favor de San Roque 2022 y propiciaron el disfrute del programa con ese “ambiente marcadamente familiar” –en el que tanto insiste–, Varela abunda en todo ello al explicar que “también en los conciertos hemos visto a muchos niños con sus padres o abuelos, al igual que adolescentes y, en definitiva, público de todas las edades que ha disfrutado como nunca de San Roque”.
Lo mejor de todo, cree, es que “la gran cantidad de actividades que hemos desplegado, y el interés que han despertado entre ese público familiar, han generado una notable afluencia que, a su vez, tiene un retorno económico muy importante en la hostelería y el comercio” de la ciudad.
Algo que se hizo notar tanto el sábado por la noche, antes del “Combate Naval”, como ayer, antes, durante y después del “Desfile de Carrozas”, en el que participaron ocho con alrededor de catorce niños subidos a cada una de ellas.
El público, que se agolpaba en las aceras a lo largo del recorrido entre la estación de autobuses y la plaza de España, disfrutó de lo lindo con esta “batalla de las flores”, en todo momento animada por la música tradicional y caracterizada por el colorido y la diversión.
De ahí que en Ravella decidieran en su día retrasar la salida del desfile hasta las 21.30 –un par de horas después de lo que solía ser habitual–, dando así tiempo suficiente a vecinos y visitantes para regresar con calma de las playas y acicalarse antes de acudir al desfile de las carrozas.
Fueron tres las aportadas por el Concello de Vilagarcía, correspondiendo las cinco restantes a diferentes colectivos de la localidad.
Todas juntas, como si de la Cabalgata de Reyes se tratara, recorrieron el centro urbano pasando por calles como Moreira Casal, Edelmiro Trillo y Gumersindo Nartallo, por la avenida Juan Carlos I y a través de la plaza de la Independencia.
Un verano de éxitos, “Revenidas”, “Ameixa Rock” y “Folk no Alobre”
Cuando Alberto Varela hace su balance “altamente positivo” de las fiestas de San Roque clausuradas ayer, extiende esa satisfacción “al conjunto del verano”.
Y es que, “a diferencia de lo que se hace en otros sitios, donde limitan su oferta a sus fiestas patronales u otras citas puntuales muy señaladas, nosotros extendemos la actividad durante meses, con celebraciones ya desplegadas o que están aún por venir, como el ‘Ameixa Rock’, ‘Folk no Alobre’, el ‘Clas Clas’, feria del libro, ‘Ás 9 na Praia’, ‘Atlantic Fest’, ‘Ágora Vermú’, el ‘Festivala’, ‘Revenidas”, el festival ‘Curtas’ y otras muchas propuestas”.
Cada una de ellas, insiste el alcalde de Vilagarcía, “con su propio perfil y públicos muy variados, pero todas ellas actividades diseñadas con ilusión para entretener y satisfacer a vilagarcianos y visitantes”.
En buena lógica, al hablar de esa variedad, hay que tener presente que, si bien la fiesta de San Roque se cerraba anoche con el “Desfile de Carrozas”, la actividad sociocultural continúa con citas como “Cine na Rúa”, el ciclo de teatro de Clámide o los citados festivales “Folk no Alobre”, el domingo que viene; “Ameixa Rock, del 29 de agosto al 5 de septiembre; y “Revenidas”, ente el 7 y el 11 del mes que viene.
20.000 personas en el entorno del “Combate Naval”
Varela, hay que insistir, valora positivamente tanto ese desfile como el “Combate Naval” celebrado el sábado a medianoche, con las playas de A Concha y Compostela como escenario.
Es una de las actividades que más destaca el alcalde –que no la única– cuando repasa los mejores momentos de San Roque.
El 'Combate Naval' es una de las actividades que más cantidad de público atraen, dejando claro que los fuegos artificiales nunca cansan y que ya son una tradición tan arraigada como la Festa da Auga y todo lo que representa y ofrece San Roque
Lo hace porque “está claro que nunca aburre –garantiza el máximo mandatario–, de ahí que después de tantos años de celebración siga reuniendo a tanta gente y, sobre todo, a tantas familias”.
Ciudadanos llegados de A Torre, Trabanca, Cornazo, Carril, Vilaxoán, Castroagudín, Cea, Rubiáns y, en definitiva, de cada rincón del municipio, así como de otras muchas localidades gallegas.
De ahí que Vilagarcía “volviera a estar a rebosar”, con el paseo marítimo y la carretera de Carril completamente colapsados.
Tanto es así que, “según las estimaciones iniciales de la policía, estamos hablando de más de 20.000 personas”, espeta Varela.
Y esa es la afluencia “in situ”, por lo que habría que sumarle a todos aquellos que disfrutaron de este arraigado espectáculo pirotécnico desde los puertos de Carril y Vilaxoán.
Incluso hay que tener en cuenta a los que siguieron su evolución desde otros lugares muy alejados de la ciudad, como Monte Xiabre o la orilla Norte de la ría de Arousa.
“No cabe duda de que el ‘Combate Naval’ es una de las actividades que más cantidad de público atraen, dejando claro que los fuegos artificiales nunca cansan y que ya son una tradición tan arraigada como la Festa da Auga y todo lo que representa y ofrece San Roque”, proclama Alberto Varela.
Festa da Auga: “Los niños pudieron disfrutar junto a sus padres"
Al hacer estas reflexiones, el alcalde también abundaba ayer en el balance positivo que el gobierno que preside había hecho ya en relación con la Festa da Auga; quizás la única celebración de San Roque deslucida por cierta inestabilidad meteorológica y, paradójicamente, por las restricciones provocadas por la sequía.
Aún así, fue de nuevo una cita multitudinaria que, si cabe, “permitió apreciar más que en otras ediciones la presencia de un público familiar”, esgrime el regidor.
Lo cierto es que al suprimirse los camiones motobomba y las mangueras conectadas a los hidrantes de la ciudad no se produjo una aglomeración tan brutal como otras ocasiones en lugares como la plaza de Galicia.
Esta circunstancia “ayudó a que los niños disfrutaran mucho más, junto a sus padres, de una de las citas más importantes de nuestro pueblo; un acontecimiento que es historia viva de Vilagarcía”, reflexiona Alberto Varela.
Algo que, insiste el alcalde, “no solo se produjo en la Festa da Auga, sino también en el ‘Combate Naval”.
