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La “movilidad amable” llega a la carretera que une Dena con A Vichona

Es un tramo de 200 metros que atraviesa Viliquín, en Meaño | Se construirá una única plataforma para vehículos y peatones

La EP-9207 a su paso por Viliquín, en Meaño. | // FDV

La carretera provincial EP-9207, es decir, el vial interior que atraviesa Viliquín uniendo Dena con A Vichona (Sanxenxo), verá uno de sus tramos reformados para adquirir el concepto de “movilidad amable”, a modo de plataforma única y común para compartir entre vehículos y peatones. Lo confirmaba el alcalde de Meaño, Carlos Viéitez, en el último pleno en respuesta a una demanda que el PSOE de la localidad mantiene desde hace tiempo en favor de la seguridad peatonal.

Se trata de un tramo de 200 metros que discurre entre las entradas de Dadín y Bouzavella en el centro del lugar de Viliquín, segmento en el que los peatones carecen de arcenes para circular, dada la inmediatez de las viviendas a la calzada. Se enclava en una carretera de 2,7 kilómetros que une por el interior la PO-550 y la PO-504 Vilalonga–Sanxenxo.

En los años noventa

En los años 90 se actuó en este vial procediendo a su ensanche hasta el límite que era posible en ese tramo central. Y después, hace unos años, se habilitó un paso de peatones elevado en la entrada de Dadín, así como tres bandas reductoras para limitar la velocidad de los vehículos en esos 2,7 kilómetros de carretera.

La movilidad amable que es una apuesta de la Diputación de Pontevedra para actuar en distintos viales de la provincia. En el municipio meañés lo hizo este año en uno de la parroquia de Cobas y ahora se pretende para este segundo tramo que se ejecute en base a un convenio entre la institución provincial, titular de la vía, y el Concello de Meaño.

El escenario de la plaza, para finales de agosto

Por otra parte, el regidor confirmó que a finales de agosto se completará la ejecución de la obras del cierre perimetral del escenario de la Praza do Concello, que fue adjudicada a mediados de marzo a la firma Dalama S.L. por importe de 96.624,27 euros, que rebajaba en 3.691,63 el presupuesto técnico de partida. Una obra cuyo plazo de ejecución era de cuatro meses que, a la postre, han expirado, sin que a día de hoy se iniciase.

El cierre perimetral del escenario para su conversión en local de ensayos de la BUMM se había anunciado que quedaría listo para que la banda pudiese hacer uso de él en verano, toda vez que en mayo vencía el plazo de alquiler de la BUMM del salón de actos de bodegas Vionta en Simes como local de ensayo.

Se trata de disponer el cierre perimetral de 210 metros cuadrados del escenario de la plaza. Se acometerá a modo de cierre metálico, confeccionado en base a perfilería de aluminio más cristaleras, a modo de estructura corrediza en los tres laterales que permanecen abiertos, a fin de que el espacio habilitado pueda utilizarse abierto o cerrado según las necesidades.

El cierre metálico y acristalado se complementará con la dotación de cortinajes acústicos de diverso gramaje en todos los laterales, además de techo acústico, calefacción y sustitución de las actuales luminarias del palco por otras. Se pretende conseguir un espacio sonoro, térmico y con luminosidad. Amén de ello, se procederá a la reparación de la actual barandilla de acero inoxidable y se dotará el interior del habitáculo de extintores en un armario metálico. Dicha obra será financiada por la Diputación de Pontevedra y el Concello.

Adjudicada la mejora peatonal en Broullón y Aldea de Abaixo

En aras de mejorar la seguridad peatonal, la Diputación de Pontevedra ha adjudicado una actuación, anunciada en su día, que afecta a los lugares de Broullón (Xil) y Aldea de Abaixo (Cobas). Se trata de dos tramos en la EP-9302 que une las parroquias de Xil y Cobas.

El primero es un segmento de 190 metros entre los puntos kilométricos 0,780 y 0,979, en el barrio de Broullón a su paso por la capilla de As Angustias, aprovechando la existencia de un estrecho en la carretera junto la Taberna de Cancela, muy socorrida y que obliga a la precaución.

El segundo es un tramo de 150 metros en Aldea de Abaixo, en Cobas, que discurre entre los puntos kilométricos 2,400 y 2,550, próximo a la zona de furanchos de la localidad.

La obra para ambos tramos se ha adjudicado por 346.046 euros, un importe que el organismo provincial financia al 70% y el Ayuntamiento al 30% restante.

El espacio en cuestión responde a dos tramos sin aceras y una calzada de ancho irregular. Merced a esta obra se convertirá en zonas con plataforma sobreelevadas en las que se priorizará el tránsito de peatones, compartiendo calzada con el tráfico rodado, el cual estará advertido por señalización tanto vertical como horizontal a la hora de circular. Para ello se habilitará un pavimento de hormigón que cada 14 metros dispondrá de bordes transversales de piedra gris. Para el contorno de la capilla de As Angustias (Broullón) se utilizará un pavimento de losa de granito gris para dar continuidad el tratamiento patrimonial de atrio de la ermita.

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