Una vez superada la pandemia o, al menos, los peores efectos de la misma, es momento de recobrar la normalidad, también en el mundo de las verbenas.
Lo cierto es que se nota que hay ganas de fiesta a lo largo y ancho de la comarca arousana y los municipios del Ullán, donde ya se escuchan las bombas de palenque y los acordes de las primeras orquestas.
Estas formaciones musicales se afinan a conciencia tras el parón provocado por el coronavirus, preparándose a fondo para la que es ya una prometedora temporada, a juzgar por el ritmo de contrataciones.
Campaña verbenera, por cierto, que también promete muchos cambios, como se anunció hace unas semanas en FARO al dar cuenta de las nuevas incorporaciones de la orquesta La Ola ADN.
Y como se apreció en la playa de Vilagarcía hace solo unos días, con motivo de la presentación de la nueva gira de Panorama.
Una gira que el mes que viene llevará a esta popular formación a lugares como Viveiro, Melide, Ourense, Vimianzo y A Coruña.
Pero también a Asturias, León, Castellón, Madrid, Almería, Jaén y Granada.
Prueba de la expectación que despiertan las verbenas es lo ocurrido durante el fin de semana en Dena (Meaño), con motivo de la tradicional fiesta de San José, que volvió tras el parón por el COVID.
Los vecinos ponían de manifiesto sus ganas de verbena durante la actuación de Ocaband y Marbella, ya que se registraba la mayor afluencia de público que se recuerda en Dena, donde también actuaron la Banda Unión Musical de Meaño y el grupo de gaitas de la cultural Penaguda.
No faltó una misa solemne oficiada por el sacerdote Aurelio Ares y cantada por el coro Santa Eulalia de Dena.
Tras la misma salía la procesión en la que, junto al santo, desfilaba la banda meañesa.
San Benito
La fiesta continúa hoy en Meaño con la celebración del San Benito “de invierno”, en Lores.
Las misas, que continuarán por la tarde, se suceden a cada hora desde las 8.00 a las 13.00 horas, cuando se oficia la ceremonia solemne, cantada por el coro parroquial San Miguel y seguida de procesión.
La subasta de gallos de corral
A las 17.00 horas se celebran las “poxas”, en las que se subastan animales vivos que han sido entregados en los días previas como ofrenda al santo, sobre todo los codiciados gallos de corral.
El otro punto de protagonismo a lo largo de toda la jornada estará en el reparto entre los devotos del “aceite miragreiro” de la lámpara santa.
Enmarcado en un paraje rural, el San Benito de Lores ofrece también la posibilidad de degustar el pulpo “á feira”, rosquillas y vinos en los puestos ubicados en las inmediaciones del santuario, o bien en las bodegas de los vecinos que son habilitadas a modo furanchos.
