Los Ayuntamientos de O Salnés en su conjunto aumentaron durante el pasado año su deuda con las empresas y autónomos. Así lo revela el informe que el Ministerio de Hacienda elabora cada tres meses para calcular el periodo medio de pago a proveedores (PMPP) de todas las administraciones públicas. Así, los municipios arousanos que rindieron cuentas en 2021 estaban pendientes de abonar a sus suministradores 5.061.000 euros a 31 de diciembre de 2020; un año después, esa cuantía se elevó hasta los 5.740.000 euros.
La paulatina reactivación económica que se produjo en 2021 propició que aumentase el gasto de los Concellos en diferentes apartados, como las obras o la programación de actividades socioculturales. En cualquier caso, los municipios de O Salnés pueden seguir presumiendo de estar entre los que más rápido pagan a sus proveedores, puesto que prácticamente todos ellos cumplen con la norma de liquidar las facturas antes de 30 días desde que entran en el registro municipal.
Los únicos Concellos que incumplieron este límite son Vilanova, Pontecesures y Valga. Estos dos últimos pagaron en el último tramo de 2021 los suministros y servicios a una media de 50 días, mientras que el periodo medio de pago de Vilanova sigue siendo de casi un año (350 días).
Meaño, Meis, Cambados y O Grove son los municipios más diligentes
Este municipio sigue arrastrando la situación económica más delicada de O Salnés en lo que respecta a la deuda con terceros, pese a que va mejorando lentamente. El 31 de diciembre de 2020 debía 1,8 millones de euros, y pagaba a una media de 357 días; a finales del último ejercicio contable, había adelantado una semana de media el abono de las liquidaciones, y logró reducir la suma de deuda comercial a 1.115.000 euros.
Los más rápidos
Los municipios más diligentes con sus obligaciones con las empresas y autónomos son Meaño, Meis y Cambados. Es especialmente significativo el caso del primero de ellos, puesto que cerró el trimestre con un periodo medio de pago de 6,50 días, prácticamente el mismo que hace un año. La diligencia contable en este Concello se nota también en que terminaron el año pasado sin deuda alguna, tal y como ya había pasado en 2020, según el informe del Ministerio de Hacienda.
También han estado cobrando con celeridad los proveedores que trabajaron con Meis y Cambados en la recta final del pasado ejercicio, con unos periodos medios de pago de 7 y 10,74 días, respectivamente, desde la entrada de las facturas por registro.
En lo que respecta a Vilagarcía, el periodo medio de pago entre octubre y diciembre pasado fue de 20,97 días -ligeramente inferior al del mismo periodo del año anterior-, y había a 31 de diciembre recibos en caja pendientes de abonar por valor de 1.606.000 euros, unos 300.000 euros más que el año anterior.
Hacienda no ha recogido en su estadística los datos contables de Catoira, A Illa y la Mancomunidade do Salnés.
Mayores incrementos
Los Ayuntamientos de O Grove, Sanxenxo y Valga son los que han incrementado en mayor medida sus deudas comerciales en el último trimestre del año con respecto al mismo periodo de 2020, cuando los presupuestos municipales se vieron fuertemente alterados por la irrupción de la pandemia de coronavirus.
En O Grove, los 229.500 euros que tenía en cola de Tesorería a finales del referido año 2020, se convirtieron en casi 920.000 a finales del ejercicio 2021.
Fueron también sustanciales los aumentos en los municipios de Sanxenxo y Valga. El primero de estos dos municipios concluyó 2021 con pagos pendientes por valor de 854.000 euros, medio millón de euros más que un año antes. En Valga, la deuda con proveedores se triplicó si se comparan los dos trimestres finales de las últimas anualidades. Así, los 54.200 euros reconocidos en 2020 pasaron a ser casi 150.000 a 31 de diciembre pasado.
El mecanismo del periodo de pago a proveedores fue desarrollado en su momento para evitar la falta de liquidez en las empresas.
