Lo que mal empieza mal acaba. El dicho se cumplió con precisión en la temporada de caza menor en O Salnés, que finaliza el miércoles, día de Reyes. La sensación generalizada entre los aficionados es que ha sido una temporada mala, y que el conejo está en trances de desaparición en los montes arousanos.
El presidente de la sociedad de caza de Armenteira (Meis), Juan José Millán, afirma que, “la temporada fue muy mala, mucho peor que la de años anteriores”. En sus cotos apenas encontraron conejo, a excepción de un par de zonas contadas. “En primavera y verano se veía bastante caza, pero en septiembre atacó la vírica más fuerte que otras veces”. La consecuencia fue una acusada mortandad.
Pero el declive del conejo es generalizado. En más de una sociedad tomaron la decisión de no subir al monte los jueves, con la intención de que el recurso aguantase hasta el final de la campaña (el día de Reyes), como fue el caso de Armenteira. En otras poblaciones tomaron el drástico camino de no matar conejos, como hicieron en la vecina localidad de Poio.
Millán opina que no será fácil revertir esta situación y volver a tener conejo en abundancia en los montes. En primer lugar, porque la situación del campo no les favorece. El abandono de las fincas y del monte genera un ecosistema que no es propicio para esta especie. Además, es muy sensible a los episodios periódicos de enfermedades, sin que los veterinarios sean capaces de desarrollar una vacuna lo suficientemente eficaz contra ellas.
“He hablado con presidentes de sociedades de A Cañiza, Crecente y Ponteareas, y están igual. Cada vez hay menos conejo en el monte”, sostiene Millán. Por ello, el presidente de los cazadores de Armenteira propone la búsqueda de alternativas novedosas, que puedan suponer cambios significativos en la gestión del recurso cinegético.
En este sentido, Juan José Millán aboga por la creación de grandes cotos comarcales o supracomarcales. Considera que esta fórmula facilitaría los trabajos de gestión de la caza (que incluye desde la siembra hasta la limpieza de los ecosistemas), y permitiría el establecimiento de vedas por zonas, que podrían ser necesarias para fomentar la recuperación de las poblaciones.
Vilagarcía
La tónica es similar en Vilagarcía. El presidente de la sociedad Karsita, Jesús Beloso, afirma que, “la situación general del conejo es bastante mala”. Sostiene que ellos lograron salvar la temporada puesto que sobrevivieron bastantes ejemplares en una franja de monte pegada a Saiar (Caldas), así como en O Pousadoiro y Loenzo, por lo que, “no nos quejamos”, pero que la sensación general entre los aficionados es que la caza menor es cada vez un recurso más escaso.
De este modo, se confirman las malas expectativas que los aficionados se formaron a mediados de octubre, cuando arrancaba la campaña que ahora entra en su recta final. Ya entonces afirmaban que las capturas eran la mitad de las de años anteriores.
La temporada cinegética menor finaliza este miércoles, 6 de enero, por lo que ayer fue la penúltima jornada en el monte.
A partir de entonces, se habilitarán para los cazadores las batidas de zorro y jabalí. Estas podrán hacerse los jueves, sábados, domingos y festivos, hasta el mes de febrero. Además, las sociedades que lo hayan solicitado podrán seguir cazando hasta el 7 de febrero la becada, una de las piezas de pluma más codiciadas.
Niebla intensa
Fueron muchos los aficionados que subieron ayer al monte para disfrutar de las últimas horas de caza menor. En el caso de los que acudieron a Xiabre, su jornada estuvo marcada por la intensa niebla, que dificultaba la vista y el trabajo de los perros, a pesar de lo cual algunos tuvieron la puntería suficiente para cobrarse alguna pieza.
Millán, sobre la superpoblación de jabalíes: “El estado de los montes es ideal para ellos”
El conejo está en decadencia en Galicia, pero sucede todo lo contrario con las especies de caza mayor, principalmente con el jabalí. “El estado de los montes es ideal para ellos”, alerta Juan José Millán. Además, apenas tienen depredadores naturales -apenas hay lobos, y estos suelen atacar primero a potros o caballos mostrencos-, de ahí que en los últimos años se haya producido un enorme incremento en sus poblaciones. El jabalí es una especie muy denostada por los agricultores, debido a que causan daños de consideración en sus cultivos, principalmente en los de maíz. Para los cazadores, suponen un quebradero de cabeza, habida cuenta de que en muchas ocasiones las sociedades tienen que responder con su seguro de los daños que el animal haya provocado en las plantaciones agrícolas. A partir del 7 de febrero volverá a haber batidas de jabalí en Galicia. También se reanudan las del zorro, aunque en este caso la densidad de población que se aprecia es menor.
