No solo se disponen a comenzar la campaña de la lamprea los pescadores conocidos como valeiros, que operan desde embarcación y fijan su puerto base en Pontecesures. Aguas arriba funcionarán, un año más, las tradicionales pesqueiras; construcciones de piedra que juegan con las caprichosas formas y corrientes del Ulla que ya empleaban los romanos para capturar el cartilaginoso pez.
En relación con esta actividad, la Consellería de Medio Ambiente abría ayer el período de solicitud para utilizar alguna de las 28 pesqueiras que aún están operativas en este cauce fluvial.
Los interesados en explotarlas deben estar en posesión de la correspondiente licencia de pesca y contar con el permiso de cuarta categoría para cada día de trabajo y cada pesqueira.
También deben encargarse de un libro de registro de capturas que deberá estar permanentemente actualizado y “debidamente cubierto”; en todo momento “a disposición de las autoridades competentes”. Una vez finalizada la temporada, ese registro “tendrá que ser enviado al Servicio de Conservación de la Naturaleza de Pontevedra”, advierten desde la Consellería de Medio Ambiente.
Desde el 4 de enero
Será así como el 4 de enero comience la actividad en las pesquerías de Areas (Herbón), donde se prolongará hasta el 27 de marzo, mientras que en las existentes en el tramo comprendido entre As Vellas (Herbón) y A Trapa el periodo de captura abarca desde el 1 de febrero al 24 de abril.
Por su parte, en las pesqueiras situadas desde A Caseta y Furado (Carcacía) hasta la de Lampreeiro, en el lugar de As Pesqueiras (Reis), se autoriza la pesca de lamprea del 8 de febrero al 8 de mayo.
Un método de captura prohibido para las demás especies
No está de más recordar que la preciada y habitualmente cara lamprea es una especie piscícola “muy particular, ya que para su captura siguen utilizándose procedimientos y artes tradicionales que están prohibidos para el resto de las especies”, resaltan en la Consellería do Mar.
Esta es la razón, asume la Xunta, “por la que cada año se establece un régimen especial para su pesca, con el objetivo de que se realice un aprovechamiento específico y ordenado de la lamprea”.
Horario de faena
En todos los casos se establece que las redes solo podrán permanecer en el agua desde las 20.00 horas hasta las 8.00 horas del día siguiente, prohibiéndose su utilización entre las 8.00 horas de los sábados y las 20.00 horas de los lunes.
Las características, explicadas por Miguel Piñeiro
En cuanto a las características de los sillares de piedra, cabe recordar que hace años el periodista y escritor catoirense Miguel Piñeiro publicaba el libro titulado “Lampreas e Pesqueiras”, editado por Editorial Galaxia.
Se trata, quizás, de la obra que mejor permite conocer la historia y características de estas construcciones que forman unos pasillos en el agua que las lampreas intentan superar nadando contra corriente. Unas nasas que se sitúan estratégicamente, aprovechando esos pasillos, a la espera de que el primitivo pez quede atrapado en su interior.
Según explica Piñeiro en su libro, las pesqueiras se dividen en cuatro tramos o grupos, situados en Herbón, Carcacía-Lapido, Barcala-Sinde y en Reis.
Las de Herbón, se conocen como Areas y Traxeito, la primera con seis “pescos” y cinco pasillos y la segunda con nueve y ocho, respectivamente. La explotación de esta construcción, resalta el escritor, “está repartida por grupos de muros denominados Cabildo, Cuarteles, Xanza, Mitra y Cortiñas”.
A setecientos metros, río arriba, “están las segundas pesqueiras, llamadas As Bellas, con la subdenominación de Bellas y Ribeiro, que miden 91 metros”, mientras que a 519 metros se localiza la tercera construcción, “el particular y único Canal de Herbón, que llega a los 120 metros de longitud entre los dos muros y alberga cuatro puestos de pesca en la orilla norte y tres en la sur, sumando cinco pasillos”.