Los alumnos del colegio Rosalía de Castro (Carril) empezaron ayer las vacaciones de Navidad sin una solución en el comedor escolar, donde recientemente la Consellería de Educación ha implantado un doble turno que ha puesto en pie de guerra a los padres, fundamentalmente porque consideran que se está jugando con la salud de los niños al reducir su tiempo de comida a apenas 20 minutos.

Tras las movilizaciones organizadas por las familias, la directora del colegio se reunió con el jefe territorial de Educación, César Pérez Ares, quien aceptó estudiar la petición de ampliar el comedor para aplicar un único turno dando cabida a los niños de la lista de espera.

El lunes los técnicos de Educación acudieron al centro escolar carrilexo para analizar in situ esa posibilidad, y ahora deben elaborar un informe en base al que se tomará la decisión de ampliar o no el comedor. Por el momento ese dictamen está en fase de redacción.