La "pulguilla de la patata" (Epitrix similaris) es una especie sobre la que aún existe cierto desconocimiento científico y cuya aparición en el entorno de las Rías Baixas es relativamente reciente, de ahí que no estén registrados aún tratamientos específicamente indicados para combatirla.

No obstante, y dado que esta especie ha sido localizada durante los últimos días en algunas plantaciones y puede causar importantes daños, los técnicos de la Estación Fitopatolóxica do Areeiro (EFA) apuntan la conveniencia de emplear los insecticidas habitualmente empleados para combatir al escarabajo de la patata, que al parecer también se ha hecho notar en la presente campaña en algunas fincas.

En la EFA creen conveniente conocer bien a este coleóptero, y acto seguido aclaran que se trata de un insecto defoliador que ataca a la patata "pero que se ha detectado también en el tomate, berenjena, pimiento, tabaco y otras plantas de la misma familia, cultivadas y espontáneas".

Es una plaga originaria de América que pudo haber sido introducida accidentalmente en Europa, a través de Portugal. Parece que llegó en forma de dos subespecies diferentes, aunque en la zona de Rías Baixas únicamente hay registros de la citada Epitrix similaris.

Supuestamente, la primera referencia de la presencia de este insecto en Galicia se remonta al año 2009 y se refiere a la zona de Xinzo de Limia (Ourense), "donde se tomaron muestras como parte de un estudio del gobierno portugués sobre la situación de la plaga". A partir de aquel momento la EFA efectuó diferentes estudios, los cuales confirman que se ha extendido al resto de las provincias de Galicia y que, "al igual que otros insectos con metamorfosis completa, el ciclo de este insecto se desarrolla en cuatro fases de desarrollo: huevo, larva, pulpa y adulto".

En relación con esto, los expertos de la Estación Fitopatolóxica do Areeiro manifiestan que "la duración de los diferentes estados no está todavía clara", y apostillan que "la escasez de información sobre esta especie se justifica por su similitud con otra que se encuentra más ampliamente distribuida, lo que probablemente ha llevado a su confusión en zonas donde ambas coexisten". Las mismas fuentes apuntan que los ejemplares adultos de estos "crisomélidos" se alimentan en las hojas, "provocando múltiples y diminutos orificios, mientras que las larvas se alimentan del sistema radicular, lo que puede favorecer la entrada de otros patógenos por las heridas causadas a la planta".