Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lucha

Ángel Amor Villar: "Tener experiencia es vital en un árbitro de lucha"

Ángel Amor Villar es el presidente del Colegio Gallego y participa en las competiciones internacionales desde hace más de treinta años

Ángel Amor, en uno de los tatamis del pabellón de Coia. E. A.

Ángel Amor Villar lleva toda su vida dedicada al deporte de la lucha. En la actualidad es presidente del Colegio Gallego de Árbitros. Este vigués, que se confiesa también veterano, pero preocupado por la juventud, fue deportista. Comenzó en el Sambo, junto a Manuel Roca, y estuvo un tiempo en el Saudade. Logró dos medallas en diversos campeonatos gallegos. Pero su pasión es el arbitraje. Desde 1982 tiene la categoría de nacional y cinco años más tarde se convirtió en internacional. Es uno de los tres que lograron estar en lo más alto. Marcos Araúuo y Diego Villanueva son los otros.

La experiencia es un grado para una persona "apasionada" de su deporte. Vivió sus mejores momentos en 1992, cuando estuvo a punto de formar parte de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Se quedó muy cerca de conseguir su objetivo. Dicen aquellos que le conocen que es un hombre tranquilo y que analiza cada detalle con mucho cuidado. Ahora, afirma, está cerca de la retirada. Le convencieron para que siguiera una temporada más, la actual. Dice que se marchará cuando considere que ya no está al nivel adecuado.

-Usted lleva mucho tiempo dedicado a la lucha, sobre todo en Vigo. Conoce muy bien este deporte. ¿Puede describir la situación actual?

-Podría decir que es buena. Los clubes funcionan muy bien y además existen numerosas competiciones. Eso es positivo. Se han hecho cosas importantes y los resultados son excelentes. Hay muchos luchadores con un gran nivel.

-¿Qué tiene de especial la lucha?

-Muchas cosas. Es un deporte muy dinámico, disciplinado y que enseña a tener una buena relación entre las personas. Son aspectos que considero vitales. La lucha también tiene un valor educativo.

-¿Qué le falta ahora mismo?

-Quizás, en mi opinión, harían falta más clubes. Eso sería lo ideal. Pero también comprendo que es complicado formarlo. Los que existen ahora en la comarca de Vigo se esfuerzan mucho. Además, han promocionado mucho la lucha y tienen una gran cantera. Soy optimista para el futuro.

-¿Le puede dar algún consejo a los que quieren ser árbitros?

-Que no miren los colores ni a los equipos Que sean neutros, imparciales. Ser árbitro es apasionante, aunque a veces tengamos que lidiar con situaciones complicadas. Pero nos ayudan mucho los deportistas con el comportamiento que tienen en el tatami. Es algo a nuestro favor y también al de ellos. Y si quieren ser árbitros que no dejen de estudiar. De esto no se puede vivir.

-¿Es complicado?

-Tiene su reglamento y hay que aplicarlo. No es más complicado que otra disciplina deportiva. Ser árbitro de lucha también es una pasión. Muchos de mis compañeros se han unido para así poder mantenerse unidos a este deporte y no dejarlo.

-¿Es difícil mantener la calma en un deporte de tanto contacto?

-La calma te la da la experiencia. Es cierto que hay alguna presión y también nervios al comienzo de una competición. Pero después del primer combate ya es distinto. La confianza es un elemento importante.

-¿Usted se pone nervioso antes de un torneo?

-No. Creo que ya he pasado esa fase. Las competiciones las afronto con tensión, ya que me gusta hacer las cosas bien. Pero después se pasa todo. Lo mejor es terminar sabiendo que tu labor ha sido positiva.

Compartir el artículo

stats