El ataque de dos perros de raza rottweiler a una mujer que paseaba por la parroquia de Reboreda el pasado viernes a mediodía no tuvo consecuencias más trágicas gracias a la intervención de Iván Soutullo, un alumno del taller de empleo que tiene lugar en el Pazo de Pousadouro y desde donde oyó los gritos de la víctima. Este vecino de Redondela, de 37 años de edad, todavía se recupera de las heridas que le produjeron los animales en su lucha por salvar a la mujer D.L.F., de 62, que sigue en el hospital.

-¿Cómo se encuentra después del susto? ¿Cuál fue el diagnóstico de los médicos que le atendieron de urgencia en el centro de salud?

-Bien, me duele el brazo y una pierna pero del resto estoy bien. Tengo una rotura de antebrazo y mordeduras en las piernas. Según me dijeron, estaré mínimo seis semanas de baja, con el brazo escayolado.

-Si no es muy traumático, ¿podría contar qué sucedió?

-Traumático es, porque ver una persona desangrada en el suelo... Estaba trabajando en el pazo y oí gritos de una mujer. Bajé a ver qué sucedía. Al dar la esquina me encontré a los dos perros y la señora tirada en el suelo, casi sin ropa. Tenía muchas mordeduras y perdía sangre. Unos metros antes se veían jirones de ropa y restos de carne.

-¿Cuál fue su reacción?

- Al escuchar los gritos pensé que era un caso de violencia de género. Pensé, como voy con la ropa del Concello le digo [al supuesto atacante] que llamé a la Policía y que ya viene de camino. Y cuando entré en el callejón vi que eran dos perros que la estaban descuartizando... Me puse a darles puñetazos en la cabeza para que la soltaran y ahí me convertí en su presa.

- En la zona hay varias casas. ¿No había ya vecinos auxiliando a la señora?

- Sí, estaba una mujer echando agua a los perros desde su casa, con una manguera. También vi a un señor mayor con un bastón... Era gente mayor, se veía que no tenían capacidad física para enfrentarse a unos animales tan grandes.

- De hecho se rompió el brazo al golpear a los rottweiler, así soltaron a la mujer pero se centraron en ti. ¿Cómo logró zafarse de ellos?

- Me escapé hacia atrás y vi un coche pasar. Quise entrar pero el conductor cerró la puerta. Los perros venían detrás, así que salté y subí al capó y luego al techo del coche, como pude.

- ¿Con el vehículo en marcha?

- En principio se paró, pero al ver los perros tan grandes continuó avanzando conmigo encima unos 500 metros. Venían como un gato cuando se sube a un árbol. Estaban esperando a que me bajara.

- Pasaría mucho miedo ahí.

- Sí, en el momento no tanto porque estás en caliente, pero luego lo piensas en frío y sí da miedo.

-¿Cómo se resolvió la situación?

-Los perros se quedaron allí esperando a que bajara del coche y entonces apareció la Policía Local. Consiguieron meter a los rottweiler en un coche patrulla. Y enseguida llegaron las ambulancias y nos trasladaron a cada uno a un centro.

-Si se viera en una situación similar, ¿volvería a hacer lo mismo?

-Yo veo una persona en peligro y actúo. Si aún me hubiera dado tiempo a ir a buscar un palo o algo, pero es que no daba tiempo a nada, había que actuar en el momento porque si no, la mataban. La tenían ya cogida uno por una pierna y otro por un brazo, estirándola para romperla en dos cachos.

-Estaba en un taller de empleo. Ahora lesionado, ¿podrá seguir?

-Es de jardinería ecológica y este lunes tengo un examen teórico, voy a presentarme. A ver cómo hago la parte práctica, que requiere horas de obra. Espero conseguir el certificado de profesionalidad.