A pleno día y en el portal de un edificio su pareja la agarró de los brazos, la zarandeó y la arrojó al suelo. A otra mujer su compañero sentimental le mordió en la cara. A otra le arrojaron un cenicero que le golpeó en la cabeza. Otra víctima sufrió escupitajos y puñetazos. Otra una agresión con una silla. Y a esta sucesión de casos se unen muchos más. La lista sería interminable. Todos ellos llegaron a juicio en las últimas semanas en Vigo y evidencian de forma cruda que la lacra de la violencia machista, en sus infinitas formas, está muy lejos de erradicarse. En los juzgados de la urbe olívica las cifras denotan que la problemática es diaria. Literalmente. En la sala especializada, la del Juzgado de Violencia sobre la Mujer, se reciben tres casos nuevos cada jornada. Y en los tribunales de lo Penal, donde se celebran juicios derivados de casos instruidos por este órgano, no hay semana en la que no se sienten en el banquillo presuntos maltratadores. En la que concluye hoy hubo casi una decena de vistas por episodios de agresiones, quebrantamientos de órdenes de protección o amenazas.
" O vives conmigo o no te dejo vivir". La intimidante frase se la dijo un vecino de Vigo a su pareja, a la que durante años sometió a un clima de "terror" con vigilancias, amenazas y continuas humillaciones y menosprecios. Este caso llegó recientemente a juicio en la ciudad. En otra vista, de hace apenas unos días, un maltratador aceptó una condena de prisión por incumplir la orden de alejamiento con respecto a su ex pese a ser consciente de que la alarma de la pulsera telemática que llevaba -una de las medidas más gravosas que se aplica en los casos de violencia machista- iba a saltar una vez entrase en el área prohibida. Otro hombre que no podía acercarse a la que había sido su compañera también estaba citado para juicio estos últimos días porque se personó en su casa, cogió una botella grande de Coca-Cola y, mientras la retorcía con sus manos, le dijo: " Esto se lo hago a la botella por no hacértelo a ti en el cuello". Los mensajes que recibió otra víctima en su teléfono, a través del WhatsApp, también tenían un alto contenido amenazante. " Mira, por mi padre que está bajo tierra, tú y yo nos vamos a ir a hacerle compañía", le escribió. Acaba de ser condenado por ello.
Vistas
Todos estos casos fueron a juicio en algunas de las tres salas de lo Penal que hay en la ciudad, a donde llegan asuntos investigados tanto en el tribunal especializado de Vigo como en las salas de Instrucción de Redondela. ¿Qué porcentaje suponen los delitos de malos tratos que se enjuician en estos juzgados? Las estadísticas no facilitan el dato exacto, pero lo que sí evidencian es que el grupo donde se integran los delitos de lesiones, los de violencia familiar -de hijos a padres, por ejemplo- y los de violencia de género está a la cabeza, representando el 20% del total. Les siguen los de robos, las estafas y apropiaciones indebidas y, en cuarta posición, los de padres separados que no abonan la pensión alimenticia mensual a sus hijos, un tipo de ilícito que se ha disparado en los últimos años por la crisis hasta el punto de situarse ya por encima de los juicios por delitos contra la seguridad vial.
En lo relativo a la violencia de género los casos no solo se elevan para juicio a las salas de lo Penal. Los más graves, los castigados con penas mayores, van a la Audiencia Provincial de Pontevedra. De hecho, en la sala viguesa de este órgano se celebrarán las vistas por dos de los crímenes de violencia machista que hubo en la ciudad olívica en 2015, un año negro. El juicio contra el sexagenario acusado de arrojar a su mujer por la ventana será este próximo mes de noviembre con tribunal popular. También habrá que seleccionar un jurado para juzgar al hombre que mató a su expareja en su domicilio de la calle López Neira, una vista que probablemente se celebrará a principios del próximo 2018.
Y antes de ser elevados a juicio todos estos casos se instruyen en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer, que, un año más, finalizará el ejercicio con la friolera de más de un millar de procedimientos tramitados. Y es que entre enero y septiembre ya registró 911 asuntos penales, cifra muy similar a la que hubo en el mismo período de 2016. Entre los casos más importantes que se encuentran en la actualidad en fase de investigación judicial en esta sala están el crimen de la joven ingeniera Ana Enjamio, del que se cumplirá un año el próximo diciembre, o el del millonario portugués que presuntamente intentó acabar con la vida de su joven esposa en un céntrico hotel de Vigo golpeándola con una maza. La instrucción de esta última causa está ya casi finalizada. El hombre lleva año y medio en prisión provisional.
