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GOLPE AL NARCOTRÁFICO

Cae un clan colombiano que traía cocaína a Vigo en bloques de granito

La Policía de Colombia culmina una operación contra un grupo de falsos empresarios que movía la droga en bloques de granito -La organización abastecía a mafias de España, Bélgica e Italia

Un militar colobmiano con uno de los cargamentos interceptados // Policía Nacional de Colombia

Los golpes al narcotráfico se suceden sin tregua. La Policía Nacional de Colombia, en coordinación con la Policía Federal de Brasil y la Interpol, ha culminado un operativo con el que se ha logrado desmantelar una organización internacional integrada por colombianos, brasileños, italianos y libaneses que, aparentando ser prósperos empresarios, traficaban con cocaína tras camuflarla en grandes bloques de granito que pesaban hasta 22 toneladas. La red, asentada en Brasil, movía supuestamente 5.000 kilos de estupefaciente mensuales y abastecía a bandas de España, Bélgica e Italia. Un alijo, descubierto en un momento inicial de las pesquisas, tenía como destino final el puerto de Vigo, ciudad a donde nunca llegó ya que esa tonelada de cocaína fue interceptada de forma previa en Amberes (Bélgica).

Los líderes de esta red, según el comunicado emitido por las autoridades colombianas, eran los herederos de históricos narcos colombianos, como Daniel, El Loco Barrera, actualmente encarcelado al ser condenado el pasado año en EE UU a 35 años de cárcel: se trata de uno de los mayores capos mundiales y tuvo contactos directos con traficantes gallegos.

Ayer, el director general de la Policía Nacional de Colombia, el general Jorge Hernando Nieto Rojas, destacaba la importancia de este nuevo operativo en su cuenta de Twitter. La banda, que identificaba sus cargamentos con una marca en forma de grano de café, no sólo actuaba desde Brasil: también se dedicaba a la producción y tráfico de drogas desde Bolivia y controlaba rutas a través de Perú y Paraguay.

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Este golpe policial se ha bautizado como Operación Cullinan III y es la continuación de otros dos operativos anteriores. La investigación, que ha culminado con la captura de los seis principales cabecillas del grupo, comenzó a gestarse en 2016 cuando la Policía Federal de Brasil empezó a sospechar de los extraños movimientos de un grupo de supuestos empresarios y ejecutivos que adquirieron allí bodegas para almacenar y exportar granito de alta calidad. Las indagaciones permitieron descubrir que en realidad se trataba de una banda de narcotraficantes.

Su estrategia para ocultar la droga, informa la Policía Nacional de Colombia, consistía en perforar piedras de tres metros de alto por seis de ancho, usando equipos de alta tecnología, para luego introducir en ellas cilindros metálicos llenos de cocaína. A continuación tapaban los orificios con sustancias químicas y otros materiales que, tras un proceso de mezcla y secado, hacían imperceptible que el granito había sido manipulado.

Fue el pasado noviembre cuando los investigadores colombianos descubrían que la red planeaba enviar un alijo de cocaína desde Brasil, vía marítima, rumbo a un puerto de Amberes (Bélgica), con destino final España: concretamente al puerto de Vigo. Pero en coordinación con las autoridades europeas la droga, 1.020 kilos, fue incautada en Bélgica.

Tras esa aprehensión, poco a poco se fueron sucediendo las detenciones de los principales investigados. Uno de ellos, Carlos Hernando Gutiérrez, Pitin, piloto de avión y helicóptero, cayó en Brasil.

En una "ostentosa fiesta" en Cali (Colombia), marcada según las autoridades de ese país por la presencia de mujeres jóvenes, drogas o coches de lujo, fueron detenidos José Omar Gómez, La Bruja, y Leonardo Esquivel, El Coleccionista. Otros dos supuestos líderes encargados de cuestiones logísticas en relación con los envíos de los alijos, así como de realizar los contactos con los grupos de narcos de España, Bélgica e Italia, también fueron capturados en Colombia. Y finalmente, la pasada semana, fue detenido el último integrante, Cristian Ricardo Gómez, CR, quien quería reestructurar la organización y convertirse en el líder.

Brasil ya solicitó la extradición de los detenidos. Los cargos que pesan sobre ellos son por presuntos delitos de tráfico internacional de cocaína y organización criminal.

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