"Aproximadamente el 1% de la población padece esquizofrenia, aunque son muy pocas las personas que llegan a experimentar violencia hacia otros semejantes". Así lo asevera Tiburcio Angosto, psiquiatra del Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima de Vigo. El doble crimen que conmocionó a todo el municipio coruñés de Arzúa fue supuestamente perpetrado por M.M.S.R. bajo un cuadro psicótico. Varios especialistas consultados por FARO explican en que consiste esta enfermedad, qué siente la persona que la sufre y cuáles son los mejores tratamientos para intentar seguir adelante tras una carga tan pesada como supone un asesinato.
"La psicosis se caracteriza por una distorsión de la realidad. Se da una interpretación falsa de la misma y, en muchas ocasiones, la persona que la sufre piensa que está en peligro y trata de defenderse", comenta el psicólogo clínico Alejandro Torres. "Pudiera ser que la agresora se sintiese amenazada a causa de un delirio, porque al parecer la relación con las víctimas era muy buena", añade Juan L. Fernández Hierro, psiquiatra del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo.
Estos pacientes no suelen ser conscientes de su enfermedad, no la asumen y por eso es habitual que abandonen la medicación si no están correctamente controlados. "Al no asumir que están enfermos, no creen que necesiten ayude y dejan el tratamiento farmacológico que se les recetó", señala en relación con este aspecto Tiburcio Angosto.
Uno de los peores momentos para los agresores llega cuando desaparece el cuadro psicótico y conocen la realidad de los hechos que han ocurrido. "Las reacciones pueden ir desde la autocrítica hasta el desconocimiento de los hechos", manifiesta Alejandro Torres. "Los enfermos que cometen este tipo de actos violentos suelen ser más víctimas que verdugos. Normalmente se les viene encima un sentimiento de gran culpabilidad que desemboca en una fuerte depresión que debe ser tratada de inmediato", añade Juan L. Fernández Hierro.
Apoyo de los allegados
Una vez que esto ocurre, lo que más necesitan este tipo de pacientes, insisten los expertos, es el apoyo de sus allegados. "La ayuda familiar es esencial para superar el trauma que están pasando. Más allá del tratamiento farmacológico que le receten, necesitan sentir el calor de los suyos más que nunca", indica el psiquiatra Tiburcio Angosto.
