La Guardia Civil detuvo al responsable de obra de una empresa de construcción que realizaba unos trabajos de reforma en el interior de una nave empresarial en el polígono industrial de Arrufana, en Mos, a raíz de un accidente laboral sufrido por unos de los operarios.

Según las primeras versiones facilitadas por los compañeros, el operario se encontraba en una plataforma elevadora cuando se precipitó al suelo desde una altura de algo más de cinco metros, golpeándose en la cabeza contra un mesado de trabajo. Como consecuencia permanece ingresado en la UCI del Álvaro Cunqueiro, en estado estable, con traumatismo craneoencefálico y respiración asistida.

La supuesta ilegalidad que dio lugar a la posterior detención surge cuando el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil detecta que el accidentado se encontraba sin los medios que determina el Plan de Seguridad y Salud, así como que se habían limpiado y manipulado el lugar donde se había producido el siniestro antes de que llegasen los agentes.

La persona detenida quedó en libertad en sede policial con el compromiso y obligación de comparecer cuando le fuese requerido.