En su turno de última palabra el acusado, Antonio C.T. insistió en que "yo no quería matarla", que su trastorno psiquiátrico le hizo actuar así, pidió perdón a la víctima y a su familia y dijo sentirse arrepentido. También manifestó que "no la molestaré más, quiero que ella tenga seguridad en eso" y que nunca se acercará a ella.