Temperaturas tropicales de nuevo en Galicia. Nuestra Comunidad estuvo ayer en el punto de mira del anticiclón de las Azores que permitió la entrada de aire cálido desde el continente africano. La alerta amarilla estuvo activa por valores que llegaron a superar los 39 grados en el sur de Lugo, en el área del Miño de Ourense y en la zona de Valdeorras. También se prestó atención con el aviso amarillo a la zona del Miño de Pontevedra y del interior de la provincia de A Coruña.
Una vez más, en este verano atípico gallego, la semana comenzó con altísimas temperaturas, que de nuevo volvieron a superar los 40 grados en algunos puntos del sur de la comunidad. Arnoia, en Ourense, fue la que marcó el récord de la jornada, con 41,4º, seguida de cerca por Leiro (41,1º) y Arbo, en Pontevedra (40,3º). Vigo alcanzó una máxima de 31,8º y Pontevedra los 33,6º, mientras que Redondela llegó a los 37,9º y la capital, Santiago, a los 36,6º. Lo cierto es que ayer fue un lunes caluroso en las Rías Baixas y Ourense y pocos puntos bajaron ayer de los 32º. En el tercio norte, las temperaturas máximas rondaron los 27-30º e incluso no llegaron a los 22º, como en Arteixo, que no superó los 21,5º, por lo que la brecha térmica fue casi de 20 grados entre algunas zonas del norte y el sur de la comunidad.
Sin embargo, la tendencia empezará a cambiar hoy mismo. El tiempo será inestable hasta el jueves con posibilidades de tormentas en el interior de Galicia. Durante la jornada de hoy se mantendrá el aviso por altas temperaturas en el sur de Lugo y la zona de la cuenca del Miño en Ourense pero el calor de ayer se convertirá en bochorno el resto de la semana. Las temperaturas irán descendiendo paulatinamente en las zonas costeras.
Según Meteogalicia, hoy persistirá la influencia anticiclónica con aire cálido que en el interior de Galicia activará la formación de nubes de carácter tormentoso, mientras que en la franja costera entrarán nubes bajas por el acercamiento de un frente poco activo.
A partir del jueves los termómetros podrían "estabilizarse", con un tiempo más acorde a los finales de agosto habituales, según Juan Taboada, de Meteogalicia.
La predicción de cara al fin de semana muestra un tiempo inestable que podrá inclinar la balanza hacia las borrascas o hacia los cielos despejados con calor. "No hay que pensar que se romperá hacia las borrascas pero tampoco se puede contar con un fin de semana de sol y calor", asegura Taboada.
El anticiclón de las Azores se acercará más a las islas británicas y al sur de Irlanda, una circunstancia que aprovecharán los aires fríos de las capas altas de la atmósfera para influenciar nuestros cielos, que podrían dejar borrascas y cielos nublados en toda la Galicia.
