Imágenes de mujeres extremadamente delgadas y demacradas, como la de la campaña de Gucci (drcha), con cuerpos irreales, como la campaña del Metro de Londres (arriba) o que sexualizan la imagen de las menores, como la campaña de Miu Miu (abajo) son las más recientes que Reino Unido ha prohibido con el objetivo de que la mujer deje de ser mostrada como un mero objeto y huir de estereotipos machistas.