En el año que más ha marcado su trayectoria profesional y después de la participación en Eurovisión, Edurne retoma la promoción de su nuevo disco, "Adrenalina" presentando videoclip y single de "Basta", una canción de desamor que integra un álbum que define a una intérprete ecléctica. Actualmente la cantante se encuentra en Galicia en plena promoción.
- ¿Qué le trae por Galicia?
- Ayer llegué a Galicia para trabajar en la promoción de mi disco. Participé en Land Róber, un programa muy divertido, y hoy estaré en El Corte Inglés de Santiago firmando discos a las 18:00 horas.
- ¿Visitará Vigo?
-Ya me gustaría tener tiempo porque Vigo me encanta, pero mañana me tengo que marchar porque estoy en plena promoción de disco, gira y presentación de single, no sé ni en qué día vivo (risas).
- ¿De dónde nace el título del single, "Basta"?
- Es una historia de desamor con la que mucha gente se puede sentir identificada. "Basta" es eso que muchas veces cuesta decir cuando hay algo que no funciona y lo mejor es decir "Se acabó".
- El videoclip del single "Basta" está teniendo una acogida muy buena.
- Era la primera vez que trabajaba con este equipo y hemos conseguido transmitir lo que quería con la canción. Ese amor de años, en el que no hay ya ni miradas, pero que la pareja sigue luchado por seguir adelante en su mundo irreal. La fotografía, la realización y demás ha sido una maravilla.
- ¿Cómo ha sido la experiencia de trabajar con el bailarín Sebastian Rowinsky?
- Ha sido un lujo y una maravilla trabajar con alguien tran profesional, cariñoso y dedicado a hacerme las cosas más fáciles. Al fin y al cabo la única experiencia que he tenido en el baile fue cuando estuve en el programa (Operación triunfo), nunca me dediqué a ello cien por cien. Me apoyó en cada momento y eso se nota, se agradece, hizo que me sintiera muy cómoda.
- En plena "resaca" eurovisiva, ¿qué retos afronta su carrera después de un acontecimiento tan intenso?
- Ha sido un año increíble, muy intenso, quizá el más potente de todos los que llevo de carrera y el que más me ha marcado por Eurovisión. La participación en el festival fue uno de los mayores retos a los que me he enfrentado profesionalmente, ha sido maravilloso. Ahora abro una nueva etapa y proyectos muy bonitos. Mi vida y mi carrera continúan y actualmente estoy inmersa en la promoción de mi nuevo disco.
- ¿Cree que participar en un gigante mediático como Eurovisión puede llegar a absorber la identidad del artista?
-Depende de cómo se quiera llevar. En mi caso siempre he dejado claro que era una experiencia más, aunque es cierto que Eurovisión requiere estar dedicado al 100% y más con lo perfeccionista que soy. Estuve trabajando desde enero y mediáticamente me expuse a un público y a una crítica diaria que me sorprendió, pero que he intentado llevar bien. Si estás contenta y segura con tu trabajo, solo debes aceptar las críticas constructivas. Es normal que una canción no pueda gustar a todo el mundo, pero lo importante es estar seguro, contento y tranquilo con lo que has hecho.
-¿Qué balance hace de su carrera si echa la vista atrás y recuerda a aquella chica de Operación triunfo?
-El balance es muy bueno y mejor de lo que esperaba. Recuerdo a la niña que entraba en el programa y deseaba tener una carrera, publicar discos y poder cantar en un escenario. Al final no solo he tenido eso, sino la oportunidad de trabajar en cosas que nunca podría haber imaginado, como musicales, programas de televisión o la publicación de libros.
-¿Qué puede contar de su faceta literaria?
-Publicaré mi próximo libro en octubre, "El cóctel de la felicidad", y en él pretendo ayudar al lector desnudándome, contando anécdotas y experiencias sobre mi carrera desde un lado positivo.
