Era una fecha marcada en el calendario para muchos de sus fans, y por fin, tras varios días durmiendo a la intemperie en el Montjuic el momento llegaba. Miley Cyrus actuaba anoche en el Palau Sant Jordi de Barcelona ante más de 17 mil fans que esperaban para ver el extravagante show de la que fue chica Disney.

Y es que la espera mereció la pena. Al ritmo de la canción Do You Realize? de los Flaming Lips, Miley aparecía por un tobogán en forma de lengua y la locura se desataba sobre el escenario. Al ritmo del SMS (Bangerz) lo bailarines, la propia cantante y el Palau entero vibraba con los ritmos de este Bangerz Tour.

El show de Miley nada tenía que ver con la que fue su imagen de Hannah Montana, y es que como bien avisaba la cantante al comienzo "Este no será un concierto normal". Mucha pirotecnia y poca ropa es algo de lo más característico de la cantante en sus shows, y esta ocasión no iba a ser menos. Al ritmo de canciones como Love Money Party, Can't Be Tamed o Adore You el show se fue sucediendo.

Las excentricidades que pudimos ver anoche sobre el escenario no dejan indiferente ni a sus fans, que no pararon de bailar y canturrear las canciones de la de Tennessee. Comer dinero, refrescar a sus fans con agua lanzada con su propia boca contonearse exhibiendo sus ingles sobre un coche o incluir a una bailarina enana son algunas de las claves del show de Miley. La de Tennessee aprovechaba su para en Barcelona para presentar su versión del Summertime Sadness de Lana del Rey, al que le sucedieron otras versiones como Lucy In The Sky With Diamonds de los Beatles, You're Gonna Make Me Lonesome When You Gone de Bob Dylan o el Hey ya de Outkast.

A pesar de los peluches humanos, abrirse de piernas o sacar su lengua a pasear en varias ocasiones sobre el escenario, el show estuvo a la altura de las princesas del pop. Sus múltiples provocaciones y los espectáculos sobre el escenario, han hecho que nadie se acuerde ya de la imagen recatada e inocente de la de Nashville pues ha dejado paso a la de diva del pop.