El periodista Javier Espinosa y el fotógrafo Ricardo García Vilanova, premiados junto con Marc Marginedas con el X Premio José Couso a la Libertad de Prensa, alertaron de la "precariedad" del periodismo en escenario de guerra y de la existencia de casi un 90% de periodistas sin contrato en Siria. Javier Espinosa, corresponsal de "El Mundo" en Oriente Próximo, y Ricardo García Vilanova, fotógrafo "freelance", permanecieron 194 días retenidos en Siria. Marc Marginedas, corresponsal de guerra de "El Periódico", liberado a principios de marzo tras casi seis meses secuestrado en Siria, no pudo acudir a la recepción del Premio, organizado por el Colexio de Xornalistas de Galicia y el Club de Prensa de Ferrol al estar en otro acto en Cáceres.

La situación del periodista y del colaborador en escenario de guerra es cada vez más precaria. Así, Javier Espinosa alertó de que "más del 90% de la información en Siria se realiza por freelance", o por "activistas comprometidos con una causa que a veces difiere con la honestidad del informador". Esta situación repercute en "la ausencia de información", como "ya pasó en Irak", puntualizó el periodista, y "las pobres víctimas, los civiles, ya no tienen la oportunidad de quejarse que es su última esperanza en un conflicto". La guerra de Siria es, a su juicio, "una de las tragedias peor cubiertas", y es "evidente" el "desinterés" de esta información en España, "como pasó con Irak".

Pero las dificultades del periodismo en conflictos bélicos también se reflejan en España, en donde ha calificado de "terrorífica" la situación de la prensa, con un "retroceso muy acentuado" ante la presión "tremenda" del "stablishment político y económico". "Si se merma la capacidad de los periodistas, se debilita la democracia y es lo que está pasando", agregó.