Otra reforma más. Esta es la conclusión que extraen los representantes de profesores y padres de alumnos gallegos del anuncio realizado ayer por el nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, sobre la próxima reforma del sistema educativo, una de las grandes prioridades de su departamento, afirmó, porque el actual modelo ha llevado a la "cultura de la mediocridad". Para ello, el nuevo titular del ramo apuesta por un "gran pacto nacional".

El ministro manifestó que el sistema educativo no es algo que permita medidas "de choque", como las que se aprobaron en el último Consejo de Ministros, pero sí es una "realidad sobre la que se puede actuar decidida y decisivamente en los próximos meses". "Ése es el propósito", dijo.

Aunque reconoció que la "gran mayoría" de las competencias en educación está transferida a las comunidades autónomas, matizó que su departamento tiene la responsabilidad de establecer los mínimos comunes de un sistema educativo que tienen que aplicarse en toda España. "Es más de estrategia y de ideas que de dinero y recursos", aseveró.

Wert recordó que los resultados en términos de abandono escolar temprano son los peores del entorno europeo, mientras que los de excelencia son los más bajos. Así, añadió que desde el momento en que se establezca un diagnóstico de los fallos del sistema educativo, la "obligación" de la comunidad educativa es mirar "más hacia adelante y menos atrás" y tratar de llegar a un "gran acuerdo nacional" para sacar a la educación de los resultados en los que se encuentra. No obstante, matizó que este pacto será "con la sociedad, desde una perspectiva amplia" y no un "pacto de estado". Wert criticó también "la pérdida de la cultura del esfuerzo" en el sistema educativo, que, en su opinión, ha llevado a una "cultura de la mediocridad o de castigo de la excelencia".

Los representantes del profesorado y de los padres de alumnos de Galicia acogieron con resignación la intención del nuevo Ejecutivo de reformar la educación, aunque en algo sí coinciden con el ministro: es necesario un acuerdo nacional de todos los agentes implicados para conseguir un modelo definitivo que consiga implantarse.

"Cada vez que llega un partido político al poder, se reforma la educación. Nosotros apostamos por un pacto por la educación porque no se puede estar cambiando de modelo cada cuatro años. Con la educación no se experimenta", se lamentó Julio Díaz, secretario del Sindicato Independiente de Profesores en Galicia. En similares términos se expresó Elisa Moreiras, presidenta de la Asociación de Directivos de Centros Públicos y directora del instituto Lope de Vega de Vigo, quien aseguró que si se reforma el sistema educativo, habrá que hacerlo desde los primeros ciclos. "No puede ser que los chavales pasen de curso sí o sí y esperar al final del ciclo para pasar, y que luego vayan bien en el instituto. La reforma tendrá que ser desde Primaria", argumentó. Moreiras añadió que quienes imparten clase en este grado "ya venían venir" los índices de fracaso y abandono escolar. "La LOXE fue un desastre, pero no se arregló", censuró.

Por su parte, Bertila González, presidenta de la Federación Olívica de Nais y Pais (FOANPAS), aseguró que el fracaso escolar compete a toda la sociedad y no solo a la clase docente, y aseguró que para revertir los datos, el sistema educativo tiene que ser "sólido y competente" y que haga sentirse cómodos a los alumnos. "Son tantos cambios que hay padres que ya no saben que sistema estudió cada hijo", afirmó.