"Las violaciones de los derechos humanos no sólo se producen en lugares lejanos", afirmó el coordinador del jurado, Klaus Ploth.

El caso de Jalloh conmocionó a la opinión pública alemana hace cuatro años, después de que éste falleciera, atado de pies y manos, en un calabozo.

La Audiencia Provincial de Dessau decidirá el próximo lunes sobre el proceso abierto contra dos policías, acusados de homicidio involuntario y de provocar lesiones graves al fallecido.

La Fiscalía parte de la base de que el hombre, que había solicitado asilo en Alemania, murió por no recibir auxilio con la rapidez necesaria.

Jalloh había sido arrestado previamente por ambos agentes tras molestar, en estado de embriaguez, a una mujer y oponer resistencia a la autoridad.

Ya entre rejas consiguió acceder a un mechero que presumiblemente había escondido entre su ropa e incendiar su colchón, lo que le provocó la muerte.

La resolución del jurado determina que la película "Oury Jalloh", de Simon Jaikiriuma Paetau, es un "símbolo" contra la "maquinaria inhumana de la autoridad".

Estos premios de cine fueron creados en 1998 por varias entidades, entre las que figuran organizaciones dedicadas a la defensa de los derechos humanos como Amnistía Internacional, y se entregan cada dos años.