El ex rector de la Universidade de Santiago (USC) y miembro del comité científico de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, Darío Villanueva, tomó posesión ayer del sillón de "D" de la Real Academia Española (RAE), vacante tras la muerte del filólogo Alonso Zamora Vicente. A las siete, el gran experto en Teoría de la Literatura, hizo su entrada en el salón de actos de la Academia, flanqueado por los dos últimos académicos en incorporarse a la RAE: el gramático Salvador Gutiérrez y el escritor Javier Marías.

En la mesa presidencial le esperaban el ministro, el director de la Real Academia Española, Víctor García de la Concha; el vicedirector, José Antonio Pascual; el secretario de la RAE, José Manuel Blecua, y el censor, Luis Goytisolo.

Con voz pausada y sin nervios aparentes, Villanueva leyó su innovador discurso, titulado "El Quijote antes del cinema", que sitúa a Cervantes al nivel de Shakespeare en cuanto a este tipo de estudios se refiere. Explicó que en el "universo precinematográfico" no sólo tienen cabida "la mejora de los modos de representación visual sino también las tradiciones iconográficas, las diversiones populares, el teatro y los relatos y la literatura novelesca en general".

Villanueva, parafraseando a Sancho Panza dijo "tener favor y ventura". "Ventura por el azar favorable del que soy beneficiario y por la oportunidad de estar en determinado lugar en el momento más apropiado; y favor el que me habéis hecho llamándome a formar parte de vuestra corporación".

Pere Gimferrer destaca la "gran riqueza temática" de su obra

El académico Pere Gimferrer destacó ayer, en sus palabras de bienvenida a Darío Villanueva, la riqueza temática de la obra del filólogo gallego, que tiene ensayos y monografías sobre escritores tan distintos como Quevedo, Bécquer, Emilia Pardo Bazán, Valle-Inclán, Torrente Ballester o Cela.

Gimferrer señaló que el nuevo académico ha centrado también sus esfuerzos en la novela lírica española de la primera mitad del siglo XX, la novela hispanoamericana coetánea, las teorías del realismo literario o el comentario de textos narrativos, entre otros. "Tal variedad no es, desde luego, versatilidad sino en el sentido más favorable del término: desde un riguroso núcleo irradiador, hecho a un tiempo de pasión, empeño y lucidez, Darío Villanueva ha proyectado su vigilante atención y su permanente curiosidad e interés hacia zonas muy distintas del territorio de la creación", afirmó el poeta.