Durante los próximos cuatro años, más dos de posible prórroga, una única empresa se encargará de todas las labores de "mantenimiento y reposición de la señalización horizontal, vertical y de placas nominativas de la red viaria urbana del Concello de Pontevedra".

La compañía, ya seleccionada por los técnicos municipales, salió de una pugna inicial de ocho ofertas, si bien cuatro de ellas fueron excluidas por entenderse que sus propuestas económicas no eran adecuadas.

El presupuesto de este contrato ronda los 200.000 euros anuales y la empresa debe actuar en todo el casco urbano y en el suelo urbano de núcleo rural. Además, toda la señalización que utilice debe ajustarse a las normas de la Comisión de Circulación y Transportes de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y a la Ley y Reglamento de Seguridad Vial, así como a las determinaciones del Concello.