Aunque la Inmaculada Concepción es oficialmente patrona del Arma de Infantería desde 1892, la inmensa devoción de los infantes del Ejército español por la Purísima se remonta a los sucesos que se produjeron en la isla de Bommel, en Flandes, entre el 7 y el 9 de diciembre de 1585. Cuatro mil combatientes españoles de los famosos y aguerridos Tercios se vieron cercados por el agua y el enemigo, la falta de víveres, la humedad y el frío tras la rotura de los diques y la inundación de prácticamente toda la isla. Fue entonces cuando un soldado español, cavando un hoyo para protegerse del frío encontró una tablilla pintada con los rasgos de la Virgen. La sacaron en procesión y esa noche comenzó a soplar un viento extrañamente gélido para aquella zona.

A la mañana siguiente, día de la Inmaculada, el día amaneció con los canales congelados lo que propició no solo la evacuación de unas tropas en situación límite, sino un contraataque que acabó en victoria para los ejércitos españoles. Es lo que se conoce como el "Milagro de Empel" y que la Brilat recuerda cada vez que se honra a su patrona, la Inmaculada, a quien se le atribuye su intercesión a la hora de congelar las aguas holandesas.

El propio general Romero Losada bromeó al señalar que ayer la lluvia y el frío que reinaron durante la celebración del acto evocaron aquellas condiciones tan duras que vivieron los soldados de los tercios de Flandes y recordó que el Batallón Zamora de la Brilat es heredero directo de aquel Tercio de Zamora que protagonizó el hito de la isla de Bommel en 1585.

La lluvia, por otra parte muy esperada en Galicia por la sequía, llevó al general a acortar su discurso. Según explicó, Romero Losada explicó que lo que quería transmitir ayer a las tropas es que "realmente el milagro no solo se produjo cuando se congelaron las aguas, que es el hecho más conocido, sino que el verdadero milagro fue el que obró la Virgen en el los corazones de los soldados españoles para saltar por encima del hielo y atacar al enemigo, en lugar de mantener solo la defensa". Aseguró que este es "el espíritu de la Brilat", heredera también de aquellos Tercios.