A última hora de la tarde de ayer, la brigada de zapadores del Ejército "rompía el ritmo" al resto de las agrupaciones participantes en el concurso-entrenamiento de patrullas con meta en Santiago de Compostela. Comenzaron la prueba, en Tui, un total de 21 patrullas, lo que supone un total de 126 soldados. Ayer habían abandonado "por distintos motivos" dos de las agrupaciones: los representantes del Ejército del Aire y la Brigada 10 del País Vasco.

El resto del contingente, un total de 114 personas, seguía su ritmo frenético de velocidad y pruebas militares, hasta alcanzar su meta en Santiago de Compostela.

Tras los zapadores, se situaban -al menos a última hora de la tarde de ayer- los representantes de la Armada de Cádiz, pero los más avanzados de la prueba habían llegado a primera hora de la noche a Pontecesures y la competición continuaba sin descanso durante toda la noche. Se prevé que lleguen de madrugada a Santiago, aunque -como decía un portavoz de la competición- "los zapadores nos están rompiendo el cuadrante" de la prueba.

Este concurso de patrullas es una mezcla entre competición deportiva, entrenamiento militar y peregrinaje espiritual a Santiago. El concurso de patrullas de la Brilat que cada año atrae a Galicia a equipos procedentes de diversas unidades de las Fuerzas Armadas y que suele también contar con presencia internacional, aunque este año se reduce a un equipo de las Fuerzas Armadas de Portugal.

En esta ocasión eran un total de 21 patrullas (diez de la Brilat, otras tantas del resto de unidades de las Fuerzas Armadas y la patrulla lusa) las que tomaron la salida en el embarcadero de la localidad de Tui. El objetivo marcado era recorrer los 120 kilómetros que los separaba de la catedral de Santiago en menos de 34 horas y 40 minutos y en medio superar un total de 7 pruebas vinculadas a su instrucción militar.

34 horas

Estas 34 horas y 40 minutos es el tiempo máximo que se establece para las patrullas, pero año a año se van batiendo récords y en 2016 las patrullas más rápidas ya invirtieron menos de 22 horas en llegar a la plaza del Obradoiro.

Las siete pruebas que deben superar las patrullas son un recorrido topográfico, una prueba de tiro con precisión, superar la pista de obstáculos, un paso de rápel, un paso de río, un lanzamiento de granadas y un recorrido cronometrado.

Dos de ellas volvieron a dejar imágenes bastante vistosas muy cerca del casco urbano de la ciudad de Pontevedra. Durante la tarde de ayer los soldados realizaron una prueba de rápel en el puente de Monte Porreiro y también afrontaron el vadeo del río Lérez, siempre cargando con todo su equipo.