Las mujeres que sobrevivieron al golpe militar franquista de julio de 1936 son todas las que están detrás de "A Lola", el título de la nueva obra de Avelaíña Teatro, una pieza que rinde homenaje a verdaderas heroínas poco reconocidas por la historia y que está representada por profesores jubilados de Pontevedra, los que forman la agrupación artística.
La historia, que este sábado, 13 de mayo, llega a la sede de la Sociedade Cultural e Deportiva de Mourente (21 horas), juega con el presente y el pasado. "Está planteada en términos pedagógicos, educativos, para recuperar la memoria histórica. Está pensada para los nietos, los que vivieron un silencio que no sabían de dónde venía, y que después descubrieron que sus abuelos estaban en las cunetas", explica Manolo Ayán, autor del texto, en el que él da vida al guardia civil Don Federico.
"A Lola" fue estrenada en el IES Poeta Diz Castro de Guitiriz, en Lugo. "Los profesores de Historia del centro les explicaron primero a los alumnos lo que había sido la República, el golpe de estado... y lo que había significado la República para la mujer, porque, sobre todo, esta obra se centra en ellas. Lola es la gente, no es nadie en concreto, es una mujer a la que, en un momento dado, le pasean a su marido por sus ideas y ella se queda con un montón de hijos, pero tiene que salir adelante", asegura el que fue profesor de Filosofía durante años en el IES Valle Inclán de Pontevedra. "Lola, perfectamente, podría ser tu abuela", señala.
La idea es que la representación toque la sensibilidad de la gente y cree ambientes emotivos fuertes. Tras su éxito en el centro de secundaria lucense, Avelaíña Teatro se ha planteado como objetivo llevar la obra de gira por otros de toda Galicia el próximo curso. "Fue fenomenal. Cuando terminamos la actuación ese día, los chavales no se iban, ni uno se levantaba de la silla, nos querían contar sus experiencias, las historias que habían escuchado en casa, hablar de los lugares que sabían que habían sido escenario de paseos", confiesa Ayán. "Queremos que conozcan este tema, porque ¿quién no tiene secuelas de esta época?", se pregunta.
En su caso, sintió la necesidad de escribir el texto de "A Lola" a través de su amistad con Pepe Álvarez, investigador de la memoria histórica, y tras entrar en contacto con Montse Fajardo, autora de "Un cesto de mazás", un libro inspirado en la misma época. "Es un tema candente porque tenemos una cuestión pendiente, ya que los hombres de entonces tienen un nombre, están ahí, pero las mujeres que se quedaron sin marido, sin hermanos, sin compañeros, esas no tienen nombre. Es un pequeño homenaje", resume.
Siete son los personajes de "A Lola", de los que cinco son fijos de Avelaíña Teatro. El hecho de que la mayoría de los componentes del grupo sean profesores jubilados ha influido enormemente en el hecho de que la obra "no opte por la frivolidad, sino por las ideas y la lucha de ideas". "Y, sobre todo, que tenga un final catártico, para que el espectador tenga una satisfacción", recalca su autor.
Trabajo colectivo
La puesta en escena ha sido la parte más difícil de la obra. "Repartir los papeles no es difícil, ni escribir el texto, ya que fue algo colectivo", informa. Por todo ello, la dirección también ha sido conjunta.
Con "A Lola", esperan contribuir a que se reconozca el papel de la mujer durante esa época de la historia, así como visibilizar "el retroceso que supuso la pérdida de los ideales republicanos". También "contribuir a que se restablezca la igualdad".
"A Lola" llega después de "María Castaña", la pieza estrella de Avelaíña Teatro, que se ha representado con éxito en más de cuarenta ocasiones, desde la creación del grupo, hace casi seis años.
"El abuso de poder y la rebeldía dentro del poder siempre está presente. Además, María Castaña tiene una música deliciosa", reconoce Manolo Ayán. La pieza todavía sigue en escena, de ahí que los profesores jubilados tengan que ajustar sus agendas para dar larga vida al teatro de aficionado.
