La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, quiso ayer poner en valor el trabajo que desarrolla el servicio de Xestión Tributaria e Catastral del ente provincial (el ORAL) que ofrece a los concellos de la provincia de Pontevedra la tramitación y cobro de sus impuestos por delegación. Son un total de 50 los ayuntamientos que tienen delegada la gestión del IAE, 52 los que delegado el IBI, 48 el impuesto de vehículos, 46 la recogida de la basura y 26 la gestión de las sanciones de tráfico. Además, el ORAL gestiona la licencia de apertura de dos concellos, las licencias urbanísticas de otros 21 y la gestión recaudadora voluntaria de otras tasas e ingresos en un total de 56 municipios. Igualmente, tiene delegada la gestión de la recaudación ejecutiva de 54 municipios.

Silva destacó que se trata de servicios que muy difícilmente podrían ser asumidos por algunos ayuntamientos en solitario. Prueba del volumen de trabajo son las cifras que mueve al año el ORAL. La presidenta de la Diputación explicó que muy probablemente el 2016 se cerrará con un nuevo récord de recaudación dado que ya se ha batido el de gestión de recibos. A día de ayer se habían emitido un total de 1.392.303 recibos, es decir, un número ya superior a los 1.189.711 de 2015; pero se espera que hasta final de año se emitan otros 120.000 más, por lo que el ejercicio se podría cerrar con 300.000 valores más gestionados que los del pasado ejercicio.

Para Silva, esta es una demostración de que "la gestión del ORAL es de matrícula de honor" y se refirió a este departamento como "uno de los servicios más importantes para ayuntamientos y contribuyentes". En estos primeros 10 meses del año se cobró más de 46 millones de euros para los concellos, cifra que aumentará sustancialmente dado que están pendientes de cobro muchos recibos. El pasado año la cifra de recaudación ascendió a 121 millones de euros, de los que 16,8 millones (es decir, un 13,9%) tuvieron que ser cobrados por la vía ejecutiva, es decir, una vez vencidos los periodos de pago voluntario. Ya el pasado año la recaudación se había incrementado en un 8,9% respecto a 2014.

El impuesto que aporta un mayor valor es el IBI urbano, con un 40% del total y más de 50 millones de euros. Le siguen otras tasas y precios públicos, 12 millones que corresponden al impuesto de vehículos, 6,2 por el IAE o 3,4 por los servicios municipales de agua. Como curiosidad, señalar que los municipios que tienen delegado en el ORAL el cobro de sanciones por multas de tráfico recaudaron 2,2 millones de euros.