Un grupo de personas en lista de espera para la obtención del carnet de marisqueo (PERMEX) ha denunciado "artimañas empleadas" por la asociación de mariscadoras a pie en la resolución de la última convocatoria por la se repartían las nuevas licencias para poder mariscar. Critican los requisitos han cambiado, especialmente al no ser puntuable para el concurso el tener en posesión del curso de marisqueo que han obtenido para la anterior convocatoria, de 2011. Desde las cofradías niegan que los repartos del PERMEX estén amañados "al tratarse de un proceso de administración" que lleva la consellería de Pesca, así como que se ocultase información a los solicitantes.
"El curso de marisqueo que tenemos, que a la Xunta le costó dinero, ni lo valoraron, es como papel mojado, no vale de nada ahora", criticaba la portavoz del colectivo afectado, Laura Bernárdez. Precisamente criticaba además, que algunos de los seleccionados en la convocatoria (solicitada por las cofradías en 2014 y que se resolvió el pasado mes de octubre) están actualmente en el proceso de conseguir el curso que los afectados sí poseen. La polémica viene porque en este concurso público, a diferencia del de 2011, no se valoraba en el baremo para la obtención del PEMEX.
En ese sentido, los afectados también denuncian engaños con respecto a los cursos que sí puntuaban. "Hay casos en los que llamabas y te decían que no había cursos, cuando sí los habían", apunta la portavoz que considera que "los cupos ya estaban previamente cubiertos. Los afortunados habían sido ya seleccionados con anterioridad", criticaron a través de un comunicado.
"Tendremos que seguir esperando mejor ocasión para poder optar a un puesto de trabajo en igualdad de condiciones, que ahora mismo no se cumplen por las maniobras de oscuridad que lleva ejerciendo la asociación de mariscadores a pie, en clara sintonía con la Delegación Territorial de Vigo de la Xunta y cuyo papel parece ser el de mera comparsa con los dictados impuestos por la asociación", apuntan los afectados, que están dispuestos a acudir a la consellería de Pesca a Santiago.
Cofradías
Desde la cofradía de Lourizán, su patrona mayor, María del Carmen Vázquez, negaba las acusaciones de que el concurso estuviese amañado. "A todo el mundo le gustaría meter a gente, mismo de la zona o que tuviese a familia vinculada con el mar, pero no se puede hacer. Pero ni aunque se quisiese hacer se podría, es imposible. La documentación, su baremos e incluso la inscripción lo hace todo la consellería. Es un proceso administrativo puro duro", señalaba Vázquez, quien también negó la falta de información: "está todo empapelado con información (en referencia a la sede de la cofradía) y había quien nos llamaba cada 15 días para preguntar", señala.
Precisamente se apunta a que en esta ocasión en la que entrarán a trabajar 23 mariscadores en la cofradía de San Telmo, 10 en la de Lourizán y 1 en la de San Gregorio, tal y como se solicitó en agosto de 2014 en la petición de plan de explotación, mientras que el resto de la lista quedó en la reserva, en vistas a entrar en cuanto se produzcan jubilaciones entre los mariscadores, algunas de las cuales ya están en proceso. Dentro de los requisitos puntuables en el baremos estaban la necesidad de estar un año empadronados en la zona de explotación, un año en paro y los cursos que puntúan dentro del catálogo de la Xunta y en el que no estaban el carné de mariscador o el de Riesgos Laborales. La lista de reserva es por un año, por lo que la convocatoria de 2011 perdió su vigencia.
Vázquez también defiende la transparencia en el proceso realizado por la consellería, disponiendo de sus correspondientes plazos de alegaciones, su exposición pública y con los sorteos de desempate públicos en varias posiciones en las que los solicitantes tenían los mismos puntos.
