Un protocolo de inversiones para todo el mandato, de 2015 a 2019, donde se detallen las obras que el Concello solicita a la Diputación y el grado de implicación económica de cada entidad. La próxima firma de este plan de actuaciones, en especial en materia viaria, de saneamiento y en deportes, fue acordado ayer entre el alcalde, Miguel Fernández Lores, y la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, en su primera visita oficial al Concello, una reunión en la que ambos responsables escenificaron la "normalización" de relaciones entre instituciones y el buen clima, derivado del propio pacto entre el PSOE y el BNG en la Diputación. Silva acudió a la cita acompañada del diputado socialista Javier Dios, mientras que en la Casa Consistorial aguardaba el edil nacionalista y vicepresidente de la entidad provincial, César Mosquera.

El protocolo pactado ayer servirá de base a lo largo del mandato para la firma de convenios más concretos, por lo que por el momento no se han establecido cantidades económicas ni los proyectos concretos que se incluirán, si bien las previsiones apuntan a que las obras se financiación al 50% aproximadamente. También está por decidir cómo se licitarán las obras. En todo caso, el documento sí recogerá las propuestas que plantee el gobierno local, sin "imposiciones" de la Diputación.

En este sentido, el alcalde adelantó que el saneamiento de Os Gafos, tras descartar la Xunta su ejecución, y la ejecución de un nuevo acceso a Monte Porreiro, desde la urbanización de Tafisa, alternativo a la avenida de Buenos Aires, son las dos prioridades. Además, se incluirán en esos convenios obras en materia de deportes, en especial un nuevo pabellón en A Parda y campos de hierba sintética.

Otro de los ejes de esta futura colaboración será el relativo al tratamiento de los residuos, en especial la planta de compostaje que promueve el Concello en Canicouva y para la que se actualizará el protocolo firmado en mayo de 2014 con la Diputación, que el PP dejó el "papel mojado" en el anterior mandato y que ahora será recuperado y adaptado a la nueva filosofía, sin un plan provincial de basuras. Se descartan plantas para muchos municipios y se apuesta por recintos para cada uno, o pequeñas agrupaciones de ellos.

Tras casi una hora de reunión con Silva, Lores se mostró "encantado" y "agradecido del trato normalizado entre instituciones", mientras que la presidenta de la Diputación subrayó el mensaje de su etapa en el cargo y que plasmó en el Libro de Honor del Concello. Indicó que "el nuevo gobierno (de la Diputación) basa su planteamiento de acción institucional en el respeto a los concellos y la Diputación debe estar a su lado para que sus proyectos puedan convertirse en realidades". Insistió en que "finalizó aquel modelo" de imponer obras a los ayuntamientos y recordó que fue ella la que quiso celebrar la reunión de ayer en la Casa Consistorial, en lugar de recibir a Lores en el Pazo Provincial.

Justificó el acuerdo a cuatro años en su idoneidad "para hacer planteamientos globales" e insistió en la "voluntad de las dos partes en desarrollar conjuntamente proyectos y hacerlo desde una nueva perspectiva, en la que es el Concello el que propone los proyectos".

Aunque a la llegada de Silva a Michelena 30, el alcalde le mostró con detalles una gran imagen de las marismas de Lourizán antes del relleno de Ence que adorna el vestíbulo municipal, el asunto del futuro de la fábrica no se abordó en absoluto, ni tampoco el reciente pleno de la Diputación en el que intervinieron los trabajadores del complejo para pedir "respeto" a sus empleos. La presidenta provincial declinó valorar aquella sesión. "Tengo mucho que decir sobre ese pleno", pero lo hará en el Pazo Provincial y en los próximos días. El que sí dio ayer nuevos pasos al respecto fue Lores, que se reunió por la tarde con las asociaciones ecologistas Defensa da Ría y Vaipolorío (no acudió finalmente Adega) para refrendar el rechazo de todos ellos a la continuidad de la fábrica en Lourizán.

La cita de ayer sí sirvió para analizar asuntos colaterales, relacionados con concesiones de Costas a la Diputación en las marismas del Alba, como el Parque de Maquinaria y la Imprenta Provincial, ubicadas en "lugares inadecuados", según el alcalde. Se trata de buscar posibles nuevos emplazamientos y estudiar hipotéticos traslados para recuperar esos terrenos litorales y "dar ejemplo de respeto al medio ambiente y de recuperación de espacios públicos". No obstante, Silva apenas hizo referencia a esta cuestión y Lores admitió que se trata de planes complejos y a medio plazo.