Junto con la cifra que indica el aumento de personas en riesgo de exclusión social, aumentaba también el de iniciativas sociales para ayudar a las personas con menos recursos. Hace más de un año abría las puertas el economato de Monte Porreiro de Solvencia, en el pasado otoño lo hacía la sede pontevedresa de Banco de Alimentos y el pasado mes de abril, Boa Vida Inserción Activa convirtió en tienda de ámbito permanente el puesto de ropa de segunda mano que ya mantenía abierta en las Navidades y que sirve con inserción para inserción laboral y pequeña ayuda para los entre 10 y 14 voluntarios en riesgo de exclusión social que la atienden.
Tanto Aurora Caoego, de Boa Vida, como Marisol Vence, de Solvencia, corroboran lo que indican las estadísticas: la pobreza sigue creciendo en Pontevedra. "La necesidad continúa. No se aprecian cambios para mejor y al economato sigue llegando más gente. Desde luego que los famosos brotes verdes no dan llegado, porque una cosa serán los datos de la macroeconomía pero no se notan en la situación de la gente", señala Vence. "Viene más gente. No sabemos si es porque nos conocen más, pero si hay más precariedad y pobreza, lo sabemos por servicios sociales", señala Coego.
En el economato atienden ya a unas 80 familias, de las cuales algo menos de la mitad son de gente de fuera de Pontevedra. Mientras, en el Boa Vida, mientras que el año pasado hacían seguimiento activo de 22 personas, en este año se aumentó en 15 más. Tal es la situación que una y otra asociación piensan en más iniciativas para seguir creciendo.
Por parte de Solvencia, este sábado inauguran la tienda de segunda mano en la calle paralela a la avenida de Vigo. Después de casi un año de "trabajos y complicaciones" pondrán a la venta ropa, carteras para el colegio, donadas a precios bajos. El dinero conseguido servirá para financiar el economato.
También está previsto novedades en este sentido. Y es que para muchos de los usuarios del economato supone un gran esfuerzo económico acudir a la sede en Monteporreiro para hacer la compra, por lo que Vence piensa en alguna alternativa para atraer el servicio al centro, manteniendo el puesto original. "Para eso pasa por un acuerdo con una empresa, con la que estamos negociando y supondría tener unos precios aun más bajos", señala.
En el caso de Boa Vida, mantiene la tienda desde abril, además de incrementar el asesoramiento y seguimiento activo a los solicitantes. Continúan con los cursos de formación y esta semana pondrán en marcha la IV Escola de Verán en la que los usuarios con menos recursos adquirirán conocimientos en gestión interna y relaciones humanas.
