Tres mil euros (1.500 si abona la multa antes del lunes aprovechando así la bonificación del pago anticipado) es la cantidad que tendrá que pagar una vecina de Pontevedra al Concello por mover de su emplazamiento una valla con una señal de prohibido el paso durante unos instantes para acceder con su coche a su garaje situado a apenas unos metros en una calle que había sido cortada.

Sucedió el pasado 13 de agosto, en la confluencia entre Víctor Cervera Mercadillo y San Antoniño a las 19.45 horas. Esta mujer circulaba por este último vial para incorporarse a Cervera Mercadillo, en donde está su garaje. No obstante, en el cruce se encontró con una valla que le cortaba el paso debido a que el vial había sido peatonalizado para la celebración de la tradicional Batalla de Flores, que discurre no por esa calle, pero sí por la que desemboca en el otro extremo, Loureiro Crespo. Dado que la mujer observó que, según explica, la Batalla de Flores ya había terminado, decidió apartar momentáneamente la valla para acceder con su vehículo a esta calle y alcanzar así su garaje ubicado a escasos metros del lugar en el que estaba esta barrera con la señalización. En el mismo momento que introducía su coche en el garaje, apareció un agente de la Policía Local que le llamó la atención por haber retirado la señal. Ella argumentó que tan solo había sido un momento y que su recorrido con el coche era de tan solo unos metros, asegurando que, de hecho, en otras ocasiones otros compañeros suyos habían retirado las vallas para que pudiera pasar. Tras la reprimenda verbal del agente la cosa quedó ahí ya que en ese momento no le entregaron ninguna multa ni documento que acreditase que la iban a sancionar por dicho comportamiento.

Su sorpresa fue mayúscula cuando el mes pasado recibió la comunicación del departamento de Recadación Executiva e Multas del Concello de Pontevedra en la que se le notifica esta multa por infracción de tráfico. Tres mil euros (1.500 en importe bonificado) como autora de una infracción calificada como muy grave en la Ley de Seguridad Vial. Concretamente, el hecho denunciado fue "retirar, ocultar y modificar la señalización en una vía sin permiso y sin causa justificada" y se señala que la infractora "retira y desplaza la valla y señal de entrada prohibida del acceso a la rúa (de tal forma que deja de ser visible)".

Desde el entorno de la mujer lamentaron la actitud del agente, un tanto "avasalladora" a su juicio dado que la Batalla de Flores ni tan siquiera pasa por esta calle y el evento ya había finalizado. El agente le aseguró que, no obstante, no habían retirado todavía la señal porque aún quedaban muchas personas transitando las zonas por las que había pasado el evento. Con todo, la mujer consideró que apenas había peligro en desplazar su coche unos metros para llegar a su garaje apartando la valla dado que en aquel extremo de la calle no había gente. Por último, su entorno niega que, como dice la multa, ocultase la valla de la calle de tal forma que se ocasionara un grave peligro para la circulación, sino que la apartó ligeramente, con la intención de volverla a poner en su lugar tras alcanzar el garaje, situado a escasa distancia.

Más allá de la infracción, desde el entorno de la mujer lamentan también la cuantía de la multa, de 3.000 euros y que abonarán en breve para poder reducir esta cuantía a la mitad, después de intentar aclarar la situación con la Policía Local, en donde se les explicó que una vez impuesta es imposible modificar la multa. En cualquier caso, muy probablemente será recurrida en vía judicial.

Consideran que es una sanción "desproporcionada" para la infracción cometida. Consultada la Ley de Tráfico y el artículo que supuestamente infringió esta conductora, se establece como infracción muy grave "la retirada, ocultación, alteración o deterioro de la señalización permanente u ocasional" por la que se establecen multas cuyas cuantías oscilarán entre 3.000 y 20.000 euros.