El joven al que esta semana rescató la Guardia Civil cuando estaba a punto de lanzarse al vacío desde el viaducto de la variante de Caldas sufrió un episodio de enajenación transitoria debido a problemas que sufrió en su puesto de trabajo, según indicaron ayer fuentes de su entorno. Esta persona no padece ningún trastorno o desequilibrio psiquiátrico como se informó por error.