El pasado mes de junio acabó con una fuerte caída del paro en la ciudad de Pontevedra así como en toda su área de influencia. El municipio pontevedrés cerró el mes pasado con un total de 8.745 parados, lo que permite bajar de la barrera de los 9.000 desempleados en la que se mantenía desde hace meses. Concretamente, tras la bajada en el desempleo que ya se produjo en mayo (que fue de 184 parados menos), la cifra de pontevedreses a la búsqueda de un puesto de trabajo se situaba en 9.110, lo que supone la creación en este mes de junio de 365 puestos de trabajo.

La caída en las cifras del paro es generalizada en todos los concellos de la comarca (Poio, Sanxenxo, Marín, Vilaboa, Ponte Caldelas, A Lama, Cotobade, Campo Lameiro, Moraña, Cuntis, Caldas, Portas y Barro, además de la capital) que suman en total 20.408 desempleados, 1.018 menos que al cierre del mes de mayo. El descenso del desempleo es una buena noticia, pero para constatar la gravedad de la situación basta mencionar que las cifras no resisten todavía la comparativa interanual. A estas alturas los 14 municipios registran 514 parados más que en el mismo mes del año anterior. En cuanto a la capital, también hay 241 desempleados más que al cierre de junio de 2012. Solo Cuntis, Moraña, Portas, A Lama y Vilaboa tienen a día de hoy menos desempleados que hace un año.

La mayor caída en términos absolutos es la de Pontevedra con estos 362 parados menos. Le sigue, como es de esperar ante el inicio de la campaña estival, Sanxenxo, en donde se crearon 224 empleos a lo largo del último mes. La caída es importante también en Marín, con 118 parados menos, y en Poio, con 96 menos.

Precisamente, desde los sindicatos se llama la atención sobre la estacionalidad del empleo que se genera en esta época del año. Aunque reconocen que el descenso de los datos del paro siempre es una buena noticia, creen que es necesario no solo analizar "la cantidad de empleo creado, sino también la calidad". Así se expresa Ramón Vidal, secretario general de UGT en Pontevedra, quien destaca precisamente que la mayor caída se produce en el sector servicios. "Las empresas contratan por periodo muy cortos y la estabilidad de los trabajadores es cada vez menor", explica, lo que además sumado a esta estacionalidad del empleo veraniego hace que desde UGT duden de un cambio de tendencia en las cifras del paro: "Habrá que esperan a octubre para corroborar si entonces se sigue esta tendencia o vuelve una caída de la contratación".

Marcos Conde, de la CIG, entiende que la población esté ávida de noticias positivas sobre la evolución del desempleo y reconoce que el descenso del paro es siempre "importante" pero considera que no hay que sacar de contexto esta cifra. De hecho, recordó que el número de parados todavía es muy superior al que se registraba a estas mismas alturas el pasado año. También llamó la atención sobre el hecho de que de los 4.500 nuevos puestos de trabajo que se crearon en la provincia, 3.500 lo fueron en el sector servicios, lo que habla a las claras de "un empleo estacionario con fecha de caducidad". A esto hay que sumar, explicó el éxodo de unos cinco mil trabajadores pontevedreses al extranjero, lo que también contribuye a reducir estas cifras. "Es un dato que no se puede obviar". José Luis García Pedrosa, de CC OO, también llama la atención sobre el dato del paro interanual, con más parados al cierre de junio de 2013 que en 2012. Aunque reconoce que el descenso del paro es "importante", es un dato "más aparente que real".