La investigación de la muerte de Celso Blanco en su despacho de la comisaría de Ourense en abril de 2016 aparentando un suicidio y la detención de los dos hermanos policías Bernardo y Roi D.L. el pasado viernes por el presunto homicidio del agente y otras seis imputaciones entre las que figuran la revelación de secretos, simulación de delito, robo con fuerza y tenencia ilícita de armas, ha abierto una nueva vía para que la defensa de dos de los policías investigados en la operación Zamburiña contra el tráfico de drogas soliciten la nulidad de la causa. La defensa sostiene que de las actuaciones llevadas a cabo por la titular del Juzgado de Instrucción 3 de Ourense, Eva Armesto, "se puede inferir que hay datos válidos para instar la nulidad en la otra causa que se sigue en Instrucción 1".

Los anónimos enviados a Asuntos Internos en 2014 de los que presuntamente se autoinculpó Celso Blanco antes de morir y que revelaban una supuesta mafia policial en la comisaría derivó en la operación contra el tráfico de droga en la que están investigados cuatro agentes de policía, entre ellos el exjefe del grupo de Estupefacientes. La nulidad en base al contenido injurioso y desacreditado de los anónimos ya fracasó varias veces. Pero esta vez, sostiene la defensa, "si se confirma que los dos investigados son los autores de los anónimos y que estos tenían la finalidad de crear pruebas falsas para imputar a otros agentes, nos ayudaría a generar más certeza sobre el hecho de que todo lo construido a partir de ahí es falso".

Por el momento, la instrucción del procedimiento se prevé larga. El abogado que representa a la familia del agente fallecido, Arturo Mosquera, indicó ayer que la analítica de la sangre hallada en el maletero de uno de los vehículos podría tardar 15 días. Se trata de determinar si tiene procedencia animal (los detenidos alegaron que eran restos de la matanza) o humana, y en este caso cotejar si se corresponde con el ADN de Celso Blanco. Asimismo, ayer se procedió al registro de otros dos vehículos incautados sin que se hallase en ellos ninguna muestra relevante.

Respecto al pago de la fianza de 60.000 euros impuesta para cada uno de los detenidos puestos en libertad la madrugada del lunes, los dos agentes acudieron ayer al Juzgado de Instrucción número 3, según informa Europa Press, para presentar dos viviendas como garantía para el pago. Acudieron a primera hora de la mañana con su letrado y mostraron su disposición a aportar la cantidad en metálico que sea necesaria para completar la fianza en el caso de que ambos inmuebles no fuesen suficientes.