El juicio contra Aniceto Rodríguez por el asesinato de su mujer, Isabel Fuentes, acuchillada en el hospital el 8 de mayo de 2015, está visto para sentencia. Tras las últimas pruebas periciales, cada una de las partes ha expuesto sus argumentos en el trámite de conclusiones finales. La Fiscalía pide 39 años de cárcel para el septuagenario y la familia eleva la petición a 49 años porque, lamentan, el marido la atacó "con saña" en los dos episodios, "agravando su sufrimiento".

"A Isabel la mataron dos veces", ha subrayado Beatriz Seijo, la abogada de la acusación particular. La letrada también ha denunciado la desprotección de la víctima, rematada presuntamente por su marido pese a que era el sospechoso del primer ataque. Al no adoptar medidas judiciales contra él, "no se le dio a la familia la oportunidad de intervenir para tratar de salvarla"

El fiscal de Violencia de Género, Julián Pardinas, solicita a la Audiencia Provincial "una sentencia ejemplarizante en nombre de la sociedad, porque son muchas las mujeres que están muriendo a manos de hombres que creen que les pertenecen". Entiende que el móvil del crimen fue que dos meses antes muriera la madre de ella, creyéndose más desatendido. En su opinión, el acusado no sufrió trastorno alguno y tiene una memoria selectiva. El desarrollo de los hechos llevan al fiscal a sostener que actuó con planificación y, por tanto, sin las facultades alteradas.

La defensa, ejercida por Jorge Temes, no descarta la intervención de otras personas y pide que se tenga en cuenta el trastorno mental del acusado por el daño cognitivo del ictus si la Sala lo considera autor. También que saliera a avisar a los vecinos en Verín, quienes llamaron a emergencias. El letrado discute la inspección ocular y pesquisas de la Guardia Civil en la casa, donde ocurrió el primer ataque, así como que "se abandonara" la línea de investigación de un robo. En cuanto al crimen consumado en el hospital, el letrado pregunta "cómo es posible" que en el cuchillo no hubiera restos de ADN de Isabel. Ve el intento suicida como signo de trastorno mental. Propone una pena máxima de 7 años de prisión, en el caso de que sea condenado. Lleva en prisión preventiva 2 años.

Aniceto Rodríguez declinó el derecho a la última palabra: "No entendí nada".