La Fiscalía pedía más de 900.000 euros de indemnización a favor de un cazador que resultó gravemente herido por un tiro rebotado durante una batida, registrada en Cenlle a principios de 2013, pero la juez impone en la sentencia un pago de unos 210.000 euros, después de que le fuera retirada la acusación al autor del disparo porque la falta que se le atribuía, por una imprudencia leve, quedó despenalizada en la última reforma del Código.
En concepto de responsabilidad civil, el autor del disparo -que rebotó en una piedra y alcanzó al perjudicado, natural de Paradela (Lugo), en la cabeza-, deberá abonar 137.000 euros al Sergas, puesto que la aseguradora ya respondió del importe máximo que debía asumir según la póliza suscrita.
La compañía fue condenada a abonar 90.000 euros al perjudicado -una cantidad ya satisfecha-, en concepto de seguro obligatorio, más 120.000 euros por el seguro voluntario.
