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"Necesitaba decírtelo ya, me encantas"

Un concurso de cartas de amor dirigido a escolares busca recuperar la escritura manuscrita que ha quedado en desuso frente a las nuevas tecnologías y las redes sociales

Lucía Hermosilla, Noelia Velo y Andrea Cerreda, premiadas en el certamen.

Si ya el correo postal estaba en decadencia, la implantación de las redes sociales y el acceso cada vez más temprano de los adolescentes a la telefonía ha dejado sin uso la carta convencional. Ya no se escriben cartas de amor. Basta un tq o un tk por Whatsapp. Pero si un enamorado se sienta con un bolígrafo frente a una hoja en blanco el mensaje de móvil con faltas ortográficas, abreviaturas y emoticonos se transforma en un relato bien estructurado, romántico y sincero.

Aprovechando la celebración del Día de los Enamorados y para evitar que el "te quiero" manuscrito caiga en el olvido, el Concello de Ourense animó a los escolares a recuperar esta antigua costumbre a través del primer concurso de cartas de amor. Participaron el colegio Carmelitas y el IES Blanco Amor con 73 cartas escritas de puño y letra por estudiantes de 12 y 13 años que sorprendieron gratamente al jurado, integrado por profesores y técnicos de la concejalía de Educación.

San Valentín y el amor fueron la excusa para que los chavales transmitiesen sus sentimientos a través de una carta y las tres elegidas representan tres expresiones diferentes del amor verdadero. El imposible, el tradicional y el de la gratitud.

Noelia Velo Outomuro, del IES Blanco Amor, fue la ganadora con una carta original y creativa en la que una bota marrón de invierno declara su amor a una chancla de verano. "Necesitaba decírtelo ya, me encantas". A pesar de que es un amor imposible por ser prendas estacionales, la bota no desespera: "Sé que no nos veremos a menudo pero nuestra relación no es del todo imposible. Nos veríamos en cada limpieza de armario".

Andrea Cerreda Gómez, del CPR Santa Teresa de Jesús-Carmelitas, obtuvo el segundo premio por "Enamorada", una carta tradicional escrita desde el corazón y en la que declara sentirse "a tres metros del suelo" desde que descubrió el amor.

El jurado decidió otorgar una mención especial a Lucía Hermosilla Tamayo, del Blanco Amor, por una carta emocionante y triste a la vez en la que, con una caligrafía empapada en lágrimas y fechada el 20 de diciembre de 1952, un hombre en el fin de la vida agradece a la mujer que acaba de perder todo el tiempo que han pasado juntos. En pocas líneas, esta niña recorre la trayectoria vital de la pareja, el vacío cuando los hijos se van y la tristeza cuando llega la vejez.

La coordinadora de actividades educativas de la concejalía, Sara Dacal, destacó la originalidad y creatividad, así como la presentación y el cuidado de la caligrafía y la ortografía demostrada por los chavales.

La iniciativa partió de la concejala Belén Iglesias que se propone con este certamen "recuperar la escritura como técnica instrumental", por eso puntuaba la buena escritura y la ortografía . "Los niños nacen con el ordenador y casi no saben lo que es escribir una carta, meterla en un sobre y poner un remite. Queríamos que apreciasen que todos los elementos que contiene una carta son también formas de comunicar", indicó la edil.

Los premios se entregaron ayer en la Escola de Municipal de Artes Escénicas en un acto presidido por Belén Iglesias. Antes de que las tres premiadas recibiesen sus regalos (un lote de libros cada una y un bolígrafo digital inteligente la ganadora), el alumnado de artes escénicas interpretó dos pasajes cortos sobre las diferentes relaciones de pareja titulados "La lata" y "El regalo". El evento, que utilizó la celebración del Día de San Valentín como excusa para que los niños se lanzasen a escribir mensajes de amor, estuvo aderezado por globos rojos en forma de corazón.

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