El objetivo del gobierno popular es poder sacar adelante en los próximos meses el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Ourense, como así lo puso de manifiesto el alcalde, Jesús Vázquez, que además deja claro que no contemplan una nueva exposición del documento aprobado en su momento, y además alerta de que eso supondría un retraso de dos años en su aprobación definitiva, que según las estimaciones que maneja sería "a finales de 2017", con lo que eso supone para la ciudad, por tratarse del documento clave para su futuro desarrollo.
En ese sentido, Vázquez aclaró, durante la visita que realizó ayer a una de las obras del plan de inversiones, en la calle Ángel Barja, junto al concejal de Infraestructuras, José Araújo, que su "obligación es sacar adelante un plan consensuado lo antes posible", ya que "lo que se plantea en estos momentos es la paralización o no de la ciudad", tanto en lo que se refiere a las inversiones que se puedan realizar a corto plazo en diferentes zonas de la ciudad como de la generación de empleo que llevaría consigo".
Dicho lo cual, sostiene el regidor , "es necesario ponernos a trabajar, y en ello estamos, para que en los próximos meses poder avanzar y aprobarlo en 2016". Pero entiende que es necesario el consenso del plenario, y de esa forma "evitar lo que pasó con anteriores planes", en el sentido de que puedan ser recurrido. Es por eso que la hoja de ruta pasa por "llegar entre todos los grupos políticos de la corporación a puntos de encuentro, por supuesto con todo lo que es la normativa vigente".
Puestos de trabajo
Lo que esgrimió el alcalde para justificar su postura contraria a esa nueva exposición del Planeamiento Urbanístico, es que a día de hoy "no se modificó el documento aprobado por la anterior gobierno socialista, sobre el que estamos trabajando". Con lo cual, salvo que los informes jurídicos así lo exigieran, "entendemos que no es necesaria esa exposición del plan".
Además de indicar que no comparte la opinión de otro grupo político, en este caso Ourense en Común, que lleva una iniciativa sobre el Plan Xeral de Urbanismo al pleno ordinario que celebra hoy la Corporación Municipal, Jesús Vázquez advierte que con esa nueva exposición "podemos paralizar totalmente la ciudad".
Y va más allá en las consecuencias negativas que puede tener, sobre todo teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra la ciudad, en el sentido de que si finalmente se produce esa "paralización" del documento por ese espacio de dos años, "se corre riesgo de perder cientos de puestos de trabajo. Una consideración directamente ligada con esa "reactivación de la economía".
Así, Jesús Vázquez hizo alusión a que en la reunión de la Junta de Gobierno Local se llevó a cabo la aprobación de la primera licencia para la construcción de edificio en los últimos meses, que supone un nuevo horizonte para el sector de la construcción, afectado directamente por la crisis, pendiente de ese documento fundamental para la ejecución de futuro proyectos.
Diálogo y consenso
En ese sentido, el alcalde asume el compromiso de impulsar un acuerdo con el resto de grupos municipales, ante lo que considera una necesidad: "sacar adelante cuanto antes el Plan Xeral de Urbanismo", que entiende es una cuestión "que debe estar por encima del debate político y las posturas partidistas", y en el que debe primar el interés general.
Un llamamiento al diálogo y al entendimiento que para Vázquez se convierten en eje fundamental para poder sacara a la ciudad de la situación en que se encuentra, aunque por parte de algunos grupos ya se plasmaron diferencias con la propuesta del grupo de gobierno, sobre todo en lo que se refiere a esa nueva exposición pública del documento.
La realidad es que los populares, que gobiernan en minoría -10 ediles-, necesitan contar con el apoyo de algunos de los grupos -DO, PSOE o OUC-, para poder aprobar el nuevo planeamiento.
