"Venid de frente si tenéis huevos, hijos de puta", decía el estado de whatsapp de un subinspector del Cuerpo Nacional de Policía de cuyos comportamientos hizo una crítica el responsable en Galicia del SUP, el principal sindicato. Una denuncia laboral acarreó al ourensano Roberto González la apertura de un expediente disciplinario que acaba de cerrarse en su contra tras más de medio año de tramitación. El director general de la Policía no impone pena disciplinaria por afirmar que el mando no se "encontraba en plenitud de condiciones para tener al mando a miembros del Cuerpo Nacional de Policía", pero lo castiga con falta grave por afectar a su intimidad. Según el articulado legal, por "la violación del secreto profesional cuando no perjudique el desarrollo de la labor policial, a las entidades con personalidad jurídica o a cualquier ciudadano".

El sindicalista colgó en un foro interno del SUP escritos sobre el mando policial, en el contexto de un clima de plantilla envilecido en A Coruña por el notable aumento de expedientes. En uno de los escritos del SUP se recogía la información de otra investigación interna, donde el subinspector admite haber bebido en un día de servicio. Además, González remitió un escrito a la Unidad de Régimen Disciplinario con una captura del estado de whatsapp del subinspector para reflejar su actitud.

Tras las vacaciones y un permiso de paternidad, González tuvo que volver a la Comisaría de Ourense para entregar la placa y el arma reglamentaria. Entre el 4 y el 9 de septiembre acató los 5 días de suspensión de funciones -empleo y sueldo, unos 300 euros- impuestos por la Dirección General de la Policía. La sanción admite recurso de reposición, en primer lugar, y una hipotética acción en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid si las alegaciones no prosperan. El responsable del SUP ya ha cumplido la suspensión pero quiere que su expediente quede sin mácula. "Creo que el j uzgado nos dará la razón; no daremos ni un paso atrás, ni para coger impulso", subraya González.

El sindicalista califica el proceso como resultado "de actuar como un sindicato reivindicativo e incómodo con los mandos", y aprecia un ataque a la libertad sindical . "Esta es una sanción totalmente injusta, un ajuste de cuentas, pero no nos callarán", dejar claro el agente de Policía Nacional.

"Una gota de whisky" en el café

En septiembre de 2014, el responsable del SUP en Galicia intervino para solicitar el archivo de un expediente contra un compañero de la Policía Autonómica y, a la vez, para que se depuraran responsabilidades contra el subinspector, tras afirmar González que habría podido consumir alcohol de servicio, a tenor de las declaraciones de testigos y del propio mando. Según el acta de ese otro expediente a un compañero del SUP, el subinspector reconoció que "en su desayuno de las 9 horas se toma un café solo y en ocasiones lo acompaña de una gota de whisky". Dos agentes de policía dijeron haber notado olor a alcohol en el superior.

En su proceso disciplinario, Roberto González defendió que únicamente dio publicidad a la primera hora de ese escrito en la zona privada de la página web del SUP, a la que solo tienen acceso, mediante clave, unos 50 afiliados. Pero la Dirección General de la Policía resuelve que lo colgó en su integridad.

El comportamiento del citado mando ha generado polémicas pero de la solicitud de investigación por parte de González "no se dedujo ningún indicio sobre la ingesta de alcohol" por parte del subinspector. En enero de este año, otro funcionario de Policía puso por escrito la supuesta visita del subinspector a un local de copas de A Coruña, donde presuntamente exhibió carné y placa para tratar de colarse en el establecimiento de ocio sin esperar en la cola. Según el agente, el mando le habría confirmado que efectivamente fue él quien tuvo un problema con los porteros "cuando estaba de copas".