Ourense se ha convertido en los últimos diez años en la ciudad de las terrazas, lo que se traduce en más de 1.000 mesas con sus correspondientes sillas repartidas por las distintas calles del casco urbano, es decir, casi un velador por cada cien vecinos. Esta proliferación de terrazas dejará unos 130.000 euros en tasas al Concello este año, según las previsiones de la Concejalía de Hacienda. Pero el borrador de la futura ordenanza de veladores va a marcar un antes y un después en esta postal urbana, con recortes o cambios en muchas terrazas y especialmente en espacios hoy saturados, a criterio del Concello, como Paz Nóvoa, casco viejo, Santa Eufemia o los centros comerciales, entre otros.

El borrador de la nueva ordenanza reguladora, que trata de actualizar el texto actual, elaborado para una ciudad que no conocía casi otros veladores urbanos que los de la Alameda o el Parque de San Lázaro, es taxativa y marca un mínimo de 1,80 metros como mínimo para peatones, traza incluso rayas en el suelo para que los usuarios que muevan su silla "fuera de la raya" sepan que invaden espacio peatonal y fija un máximo de 30% de ocupación de plazas públicas.

La edil de Comercio. Juana Ageitos. puntualiza que la intención es "apostar por la convivencia entre los peatones, los usuarios y los hosteleros" pero no a todos los comerciantes le convence. Esas novedades incluidas en el borrador de la ordenanza de veladores en plaza afectarían de algún modo a todos los hosteleros, especialmente a terrazas de zonas como la Alameda y Paz Nóvoa donde no podrían superarse las 20 mesas máximo por local que marca la nueva normativa; el entorno de Santa Eufemia y el casco viejo, donde en algún caso es difícil dejar esos 1,80 metros necesarios para los peatones, las propias terrazas exteriores de centros comerciales que, al igual que otras terrazas cubiertas que funcionan en la ciudad, no pueden según la nueva normativa, estar abiertas todo el año.

Según Javier Outomuro, secretario de la Unión de Hosteleros Ourensanos (UHO), "una de las cuestiones difíciles de cumplir y que incluimos en las alegaciones que acabamos de presentar, es la obligatoriedad de que el espacio que se dedica a terrazas en el exterior sea igual o menor al que tiene el interior de la cafetería. La mayoría de los establecimientos disponen de un espacio interior pequeño y lo compensan con las terrazas del exterior", explica.

Una de las zonas que suma mayor número de incumplimientos, según fuentes municipales, sería la propia plaza Paz Nóvoa, donde la proliferación de veladores chocaría con esa ocupación máxima del 30% de una plaza pública con terrazas que marca la nueva ordenanza, lo que suprime espacio para el paseo y para el ocio infantil. "Ahí sí reconocemos que no queda ni sitio para jugar los niños y hay que regularizarlo", reconoce el presidente de los hosteleros.

Los horarios serán también tema de discusión, pues solo podrán estar instaladas la terrazas de 9 de la mañana a 1 de la madrugada en los meses de mayo, junio, julio, agosto, septiembre, así como en la primera quincena del mes de octubre, algo que incumple la mayoría.

La Unión de Hosteleros Ourensanos reconoce que ha presentado una serie de alegaciones por registro, pero "estamos seguros de que muchos comerciantes no actuarán hasta que sea demasiado tarde, cuando la ordenanza esté aprobada".