"No quiero corruptos en mi partido", aseveró José Manuel Baltar tras ser reelegido por mayoría el sábado en el congreso que ha consagrado la unión sobre el papel de los dos PP de Ourense. El presidente ha tenido la primera respuesta a esa proclama en favor de la limpieza desde las filas de la oposición. El grupo provincial del BNG le ha tomado la palabra. Los nacionalistas solicitan a Baltar que por "coherencia" aplique la máxima de transparencia en su grupo de diputados de gobierno. El BNG se fija en la situación de tres alcaldes y diputados inmersos en problemas judiciales (O Carballiño y Baltar) o fiscales (Barbadás) para reclamar al presidente que fuerce su salida del pleno.

Los nacionalistas son el único partido que exige sin salvedades la salida del cargo de sus representantes imputados. Frente a las apelaciones a la presunción de inocencia y los tiempos judiciales que Baltar realizó acompañando su discurso de rechazo frontal a los corruptos, los nacionalistas entienden que debe obligar a los diputados que están imputados a renunciar "por mostrar una actitud impropia e inapropiada de quien, como representante público, debe tener una conducta ejemplarizante".

El regidor de O Carballiño, Argimiro Marnotes, conserva cargos por presunto cohecho y revelación de secretos en la operación Pokémon. La falta de medidas cautelares como una fianza le sirvió para conservar el cargo y también la militancia, a diferencia del alcalde de Baltar, José Antonio Feijóo, quien tras aferrarse al cargo en un primer momento, reculó y solicitó la baja temporal de militancia ante la apertura de un expediente por parte del partido tras confirmarse que será juzgado por amenazas a rivales del PSOE. José Antonio Feijóo ya no es del PP pero, sin embargo, votará junto a sus compañeros en la Diputación y permanece asistiendo a reuniones en el órgano provincial.

Pero el BNG también cuestiona la permanencia en el cargo del alcalde de Barbadás, José Manuel Freire Couto, con un elevado patrimonio que compatibiliza con una dedicación exclusiva como presidente del centro dependiente Inorde, y que fue multado por una infracción grave tras ocultar más de 200.000 euros a Hacienda.

"Para nosotros no valen las excusas y, desde el respeto más escrupuloso por la presunción de inocencia, entendemos que una cosa son las posibles responsabilidades penales, si las haya, y otra bien distinta las responsabilidades políticas", plantea el BNG en una moción que llevará al pleno del viernes. Baltar anunció un próximo mandato de la transparencia en el PP de Ourense, pidió a los 79 integrantes de su comité que firmaran un compromiso ético y obligará a su directiva a revelar su patrimonio. "Pensamos que usted debería pasar de las palabras a los hechos, y hacer lo propio con aquellos miembros de su partido que están inmersos en distintos procesos judiciales, y que son diputados en la institución que preside", expone el grupo nacionalista.