Prefiere no mezclar su faceta profesional de médico ginecólogo con la vena artística que le ha convertido en pintor paisajista. Sin embargo, su trabajo le resta bastante tiempo a la vocación pictórica. Desde hace 6 años pinta sin descanso en su tiempo libre y fruto de ello son los más de 250 cuadros que tiene catalogados. José García vive y trabaja en Vigo pero su mente está siempre en el paisaje de Galicia, y especialmente en Albeos, la aldea paterna de Crecente en la que afloró su pasión por la naturaleza y la pintura.

-¿Sabe que no es el primer médico que combina su trabajo con la pintura?

-Sí, conozco a José María Rielo y creo que es un gran pintor con una gran obra.

-Su pintura es paisajista, sin excepción, ¿nunca se ha planteado cambiar?

-No, mi meta es ser un gran paisajista. Siempre me gustó el paisaje gallego. Soy un gran amante de Galicia y su cultura.

-El urbanismo atroz le restará espacios que pintar...

-Sí, entre casas, viñedos y urbanizaciones es difícil encontrar un buen paisaje. Yo busco los no tocados. Hay que saber dirigir la mirada y se encuentran. Algunos son salvajes, pero hay que perderse. A lo largo de todos estos años lo he conseguido.

-¿Dónde están?

-Están por todas partes, he pintado paisajes de A Courña, Ourense, marinas, la parte baja del Miño, Arbo... no tengo predilección por ninguna zona. Salgo cuando está la atmósfera adecuada y busco. Necesito que la cromática y la belleza me digan algo. Entonces lo fotografío y lo pinto en estudio.

-Su obra se caracteriza por el uso de la espátula, ¿como la define usted?

-La espátula la usé mucho al principio, ahora pinto más con pincel, pero también alterno o combino. La mía es una pintura figurativa que a veces tira hacia el realismo y en ocasiones se para en tonos impresionistas. Algunos ven una interpretación romántica porque a veces utilizo colores neutros con matices melancólicos.

-¿Es por que sus cuadros son fruto de la melancolía?

-El estado de ánimo influye, pero también la atmósfera. No me gusta el paisaje con luz abierta, de verano, me gusta más una luz matizada, filtrada, cielos más bien grises. Huyo del matiz cromático excesivo.

-Su relación con el pintor Santiago Montes Areas le ha estimulado como pintor pero ¿con qué clásicos se queda y cuáles son su pintores gallegos preferidos?

-Camille Pissarro, Van Gogh, Monet, Cezànne... De Galicia a los que más admiro son los paisajistas Antonio Quesada, LLorens, Pousa, José Frau...

-Su obra puede verse en el Centro Cultural Diputación hasta el 3 de mayo, ¿qué tal acogida está teniendo?

-Parece ser que ha tenido más de 300 visitas en los primeros días. Es porque hago una pintura de lectura fácil, agradable. No intento inquietar ni reivindicar, sino mostrar lo que siento ante el paisaje.