El sector de la pesca de bajura afronta en las próximas semanas el inminente inicio de la campaña de navidad, una de las épocas más importantes de trabajo. Siempre y cuando las condiciones meteorológicas permitan a los distintos colectivos salir al mar. Las expectativas, si se tienen en cuenta las cifras de venta en lo que va de año, son alentadoras. Las lonjas de la comarca de O Morrazo han facturado en conjunto durante los diez primeros meses de este 2016 una cifra que supera los 7,6 millones de euros. Es un aumento muy significativo con respecto al mismo periodo de 2015, en el que los ingresos fueron de 5,5 millones, según los datos de la plataforma Pesca de Galicia. El caso más llamativo es el de la lonja de Bueu, que entre enero y octubre facturó 3,1 millones de euros. Esto significa un millón de euros más que en los mismos meses del ejercicio pasado. No solo eso, sino que a estas alturas ya supera las ventas globales de todo 2015, que fueron de 2,7 millones de euros.
La progresión de la lonja buenense está muy sujeta a la evolución de su especie más reconocible, que es el pulpo. Este año 2016 está siendo uno de los mejores periodos de trabajo para el sector de la nasa: hasta finales ede octubre se subastaron más de 283.700 kilos de cefalópodo, con unas ventas de 1,7 millones, unas cifras que contrastan con los apenas 99.000 kilos y 628.000 euros de 2015. Especies como el percebe o la navaja también aumentan capturas y facturación.
Las medidas adoptadas por el sector en otros recursos, como el erizo, también se dejan notar. El erizo se ha convertido en los últimos seis años en una fuente progresiva de ingresos y los marineros implementaron decisiones para proteger la especie, sobre todo después de ver las consecuencias de la sobreexplotación en la costa de Asturias. En lo que va de 2016 se han recogido unos 6.000 kilos menos que en los primeros diez meses del año, pero los ingresos han aumentado: 179.000 euros en 2016 frente a 148.000 euros en 2015. Los recolectores acordaron recientemente rebajar aún más los topes diarios de capturas para proteger la especie y contribuir a que se mantengan los precios, que han llegado a rozar los 10 euros el kilo.
El caso de la lonja de Cangas también es revelador. La cifra de mercancía subastada en los diez primeros meses del año es ligeramente inferior a la de idéntico periodo del anterior ejercicio: 465.600 kilos en 2016 frente a más de 480.000 kilos en 2015. Pero el precio de esos productos ha sido muy superior, tal como constatan las cifras de facturación, que pasan de 2,2 millones de euros a más de 2,8 millones. La situación ideal para los expertos: menos esfuerzo pesquero, pero mayor valor y rendimiento comercial.
Al igual que en Bueu se registra un alza importante del pulpo, que pasa de unos ingresos de 331.300 euros a más de 800.000. Lo mismo ocurre con la navaja, que es una de las especies más demandadas en Cangas gracias a su marca Navalla de Cíes, y con todas las especies del marisqueo. La única excepción significativa es la del percebe, que bajó ligeramente en capturas e ingresos.
Uno de los recursos más llamativos es el denominado "carallo de mar", que en 2015 empezó como un plan experimental. En ese periodo se recogieron casi 650 kilos, con un valor en lonja de 3.700 euros. En lo que va de 2016 se han subastado casi 15.000 kilos con una facturación superior a los 44.500 euros.
El buen comportamiento del marisqueo permite que en Moaña se constate un incremento en sus capturas (más de 130.200 kilos frente a 97.600 del año pasado) y en las ventas, que de 789.600 euros pasan a más de 1,1 millones. Las distintas clases de la almeja han experimentado avances importantes en las cifras de captura y facturación, aunque llama la atención el tirón de la japónica. Si en los diez primeros meses de 2015 se recogieron algo más de 50.000 kilos, que supusieron ventas por valor de 328.500 euros, en este 2016 las capturas rozan los 78.000 kilos y los 630.000 euros. L japónica ha llegado a venderse a un precio máximo de 11,50 euros, cuando en 2015 el importe máximo fue de 9,40. Algo parecido ocurre con la fina, que en este ejercicio registra un precio medio de 28,30 euros frente a los 23 de 2015.
La lonja de la ría de Aldán-O Hío mantiene la misma tendencia que el resto. Su facturación entre enero y octubre se sitúa por encima de los 570.000 euros, cuando el año pasado en este lapso de tiempo no alcanzó siquiera los 400.000 euros. El arte de la nasa del pulpo es la más importante en volumen de capturas y ventas, con más de 43.800 kilos y 271.000 euros frente a los 22.800 kilos y apenas 149.000 euros del año pasado.
La navaja y la almeja japónica son otras de las especies con mayor peso en la lonja de Aldán y que también experimentan un salto con respecto al mismo periodo de 2015, con ventas superiores a los 125.000 y 56.000 euros respectivamente.
