El puente de Halloween se saldó con cinco denuncias interpuestas por la Policía Local de Cangas que se cursaron por la vía de la ordenanza de Convivencia Ciudadana. Los agentes sancionaron a dos personas por orinar en la vía pública y a otras tres por consumir bebida alcohólicas, también en la calle. Ambas son cuestiones que trata la citada ordenanza municipal y se que penan con 200 euros de sanción económica o trabajos para la comunidad.
La Policía Local denunció a otra persona por golpear de forma reiterada y violenta unos contenedores. El menoscabo a la labor de los agentes mostrado por el joven se tramitará a través de la Subdelegación del Gobierno.
También se notificó este puente a una discoteca de un apercibimiento de cierre por incumplimiento de horario. Según la Policía Local de Cangas, fue un Halloween que no destacó precisamente por actos vandálicos y las fiestas de disfraces se desarrollaron con normalidad.