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La Policía ya había informado en junio del mal estado del muro de Isamil

Un informe advertía de que las piedras estaban rotas y que corría peligro de derrumbe - Confirma la versión de los vecinos

El muro que se desplomó el jueves a primera hora de la mañana en el camino de Isamil, en Meira. //S.A.

Los vecinos del barrio de Isamil, en Meira, afectados por el desplome de un muro de grandes bloques de hormigón, tenían razón cuando aseguraban que ya habían advertido en varias ocasiones al Concello de las malas condiciones en las que se encontraba esta construcción. Aseguraban que en verano ya habían acudido al Concello para alertar, pero el gobierno reconocía el jueves, tras el desplome del muro y quejarse los vecinos, que no tenían constancia escrita de la mala situación, tal y como denunciaban los afectados. Sin embargo existe un informe de la Policía Local, al que ha tenido acceso este periódico, que confirma las palabras de los vecinos en el sentido de que ya existen varias piedras rotas y que corre peligro de derrumbarse.

Los vecinos se quejaban el jueves de que el muro se desplomó sobre un vial por el que suelen transitar los niños que acuden hasta la parada de la PO-551 para coger el autobús escolar y alertaban del peligro que suponía tener aquel muro en semejantes condiciones.

Dicho muro lo había construido el Concello en la época del anterior gobierno bipartito como contención de un terreno que se utiliza como aparcamiento. El problema es que se construyó mal, sobre uno antiguo de piedra pequeña que con el peso de los grandes bloques fue cediendo hasta romper.

La caída del muro sepultó el perro de una casa que dormía en la parte exterior dentro de un bidón metálico y que afortunadamente, después de cuatro horas, pudo ser rescatado con vida.

Nada más desplomarse el muro, el Concello envió un tractor para asegurar las piedras pero a mitad de obra, los vecinos impidieron que siguiera trabajando porque entendían que el muro se estaba levantando de nuevo mal y sin seguridad. Al día siguiente, la alcaldesa, Leticia Santos, con los concejales Odilo Barreiro y Ezequiel Fernández, se reunieron con los vecinos. La regidora les explicó que era necesario que dejaran seguir trabajando al tractor para asegurar las piedras y que desde el Concello s iba a buscar una solución definitiva a pesar de que la parcela no es de su competencia sino de Carreteras. En esa reunión quedaron en volver a reunirse el jueves estando también la Asociación de Vecinos Arroás.

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