En el barrio de Serra Nacente en la parroquia de Darbo, en Cangas, todos conocen y respetan a Vicente Allo,que es natural de Nigrán aunque reside en este municipio de O Morrazo. Sus vecinos, frente a su casa, en una tranquila urbanización donde predominan las viviendas unifamiliares y con amplias vistas a la ría, respetan el anonimato que este Policía Nacional, con cargo de subinspector, quiere seguir manteniendo y que se rompió con el trágico suceso del atraco del pasado 28 de noviembre en el Calvario, en Vigo, que le costó la vida a su compañera en el Cuerpo de Policía, Vanessa Lage y en el que él resultó herido por varios impactos de bala del atracador, abatido de muerte en el tiroteo. El día 3 de diciembre despertó en el Hospital Xeral del coma inducido y el sábado 6 recibió el alta. Desde entonces permanece muy recluido en su casa, acompañado y apoyado por su mujer Noelia Núñez y sus dos hijos, para recuperarse de las lesiones físicas y, sobre todo, psicológicas.
Vicente Allo no quiere cámaras, tan sólo colgó en su facebook un escrito, nada más recibió el alta y llegó a su casa, en el que su primer recuerdo era para su compañera, a la que calificó de "ángel de la guarda". Su facebook, que antes estaba muy limitado a sus amigos, tiene ahora 1.300 amigos de todas partes que le animan en este duro camino de la recuperación. Allo está acostumbrado a llegar a metas y ahora le ha tocado alcanzar la más difícil, quizás, en su vida, como es la de intentar recuperar la normalidad en su vida.
Además de apoyarse en su familia, el subinspector intenta volcarse en una de sus grandes aficiones como es la bicicleta, que le reporta también una larga lista de amigos y ahora también de seguidores. Por sus amigos más cercanos, se sabe que hace tres días empezó a hacer rodillo, que es un aparato que se utiliza para hacer bicicleta estática con la bicicleta normal de carretera. Aunque, sabe que tiene que cuidarse porque los disparos que recibió le dañaron un pulmón. Por eso que todo dependerá del médico y si éste lo autoriza, la intención del policía, según las fuentes consultadas, es poder salir la próxima semana a la carretera en bicicleta. Vicente Allo no solo piensa en su recuperación sobre las dos ruedas, sino que ya se está planteando, si el médico se lo permite, volver al trabajo cuando pasen las fiestas de Navidad.
Su mujer Noelia defiende la privacidad de la familia y asegura que su marido no quiere notoriedad, quiere estar con sus amigos, con su bicicleta, con su trabajo, retomar la vida con calma y con mucha tranquilidad, pero lejos de las cámaras, fiel a cómo es él. Ya en su escrito en el facebook tras recibir el alta médica, escribía: "...no me gusta ser centro de atención...las balas no han sido capaces de llegarme al corazón pero vosotros sí. Demostráis que hay mucha gente por la que seguir luchando y viviendo".
Noelia Núñez es amable, como así lo demostró cuando en su facebook, también, agradecía las muestras de cariño hacia su marido y toda la familia.
Vicente Allo, que trabajó una temporada como Policía Local en Bueu, es conocido en Cangas, precisamente, por esta vinculación al deporte del ciclismo. Desde muy joven formó parte de las categorías inferiores del Club Ciclista Cangas, aunque hace algún tiempo se pasó al Club Ciclista Cambre en donde compite en la categoría de élite, en lugar de hacerlo en la de veteranos como le correspondería a su edad.
Recepción
Mientras el policía nacional se recupera volcado en su afición por el ciclismo, desde el Concello, el regidor, José Enrique Sotelo, quiere realizarle una recepción en la alcaldía, sólo si él quiere. Sotelo ya había acudido al hospital en Vigo para visitar a la familia cuando el subinspector se encontraba en coma inducido.
El alcalde asegura que también quiere ser respetuoso con Vicente Allo y con su manera de no querer tener notoriedad, por eso que la recepción depende solo de él.
