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Yolanda Ogando: "Es un logro romper el estigma de que los niños no pueden bailar, que es cosa de niñas"

"El objetivo es que los alumnos se formen, pero también que aprendan valores de tolerancia, respeto y trabajo en equipo"

Yolanda Ogando en una de sus clases en el pabellón municipal de Lalín. // Bernabé/Javier Lalín

Máisquedanza prácticamente acaba de nacer y su escuela ha crecido exponencialmente con el paso de los años. De ser tan solo un grupo de bailarines ahora ya cuentan con 300 alumnos repartidos no solo por diferentes municipios de la comarca dezana, sino también en Arzúa. Este sábado el colectivo realizará una exhibición en dos tomos, como los buenos libros. El Salón Teatro de Lalín acogerá el sábado una actuación por la mañana (12.00 horas) y otra por la tarde (19.30 horas) que mostrará a los asistentes todo lo trabajado durante el curso por +QDanza. Un trabajo del que mucho tienen que ver Yolanda Ogando y Marta Maceira, profesoras de la escuela.

-¿Cuántas coreografías se presentarán en este espectáculo?

- Vamos a dividir el festival en dos partes. Una actuación por la mañana y otra por la tarde, la de la mañana empezará a las 12.00 horas hasta las 13.30 horas donde se representarán un total de 14 coreografías y por la tarde será desde las 19.0 horas y hasta las 21.00 horas y se realizarán 15 coreografías. No hay diferencia entre las actuaciones de la mañana y de la tarde, simplemente las dividimos porque tenemos unos 310 alumnos y el aforo del Salón Teatro no nos permite acoger tanto. Algunos de los alumnos actuarán mañana y tarde pero la mayoría no repiten.

-Acaban de competir también en 'Stars Dance', ¿que balance hacen del certamen?

-Tuvimos un primer premio en categoría Kids en el estilo fusión; un primer premio en la categoría Major en el estilo jazz musical con la coreografía La La Land; después dos segundos en Kids; uno en danzas urbanas y otro en fusión; luego un premio al mejor bailarín kid, para Samuel Fernández Fernández, un premio que nos gustó mucho y que lo consigue por segundo año consecutivo y para terminar conseguimos ser la Mejor Escuela Major. A mayores obtuvimos un premio de un workshop en el Dancerveira y conseguimos un premio especial que lleva consigo una clase de un coreógrafo aún por concretar para +QDanza. Para nosotros realmente es un aliciente para seguir trabajando, pero nuestra meta cada vez que vamos a un concurso no es poder ganar; obviamente siempre que consigues un premio es una alegría, pero nosotros buscamos que los niños vean cómo es una competición, cómo se tienen que desarrollar, que todo conlleva una responsabilidad, con el vestuario, con los peinados y los maquillajes, tener un control de cuando tienen que actuar.

- ¿A que se debió ese crecimiento de +QDanza en los últimos años?

- Creció mucho. Casi cada año aumentamos cerca de 100 alumnos. También es verdad que este año damos clase en Arzúa, por ejemplo y eso aumenta un poco. Al principio éramos solo 90.

-¿De dónde vino la idea de poner la asociación en marcha?

-Nosotras teníamos una maestra y queríamos que esa profesora siguiera con nosotros y queríamos también montar algo y que nos representase en Lalín y poder formar más grupos. De ahí surgió +QDanza en el 2011. Actualmente las codirectoras somos Marta Maceiras y yo, pero siempre tenemos gente que nos ayuda mucho, como por ejemplo María Cagide, que no es profesora pero está como una más porque siempre ayuda con muchos grupos. Y además los miembros de la directiva que son Javier, Sonia y Carmen Ansedes que sino fuese por ellos sería muy difícil llevar esto.

-¿En qué lugares imparten clase?

- Tenemos varios grupos en Lalín, también estamos en Rodeiro, Silleda, en Prado y ahora en Arzúa.

-¿Qué objetivo se pone el colectivo?

-Realmente nunca ponemos objetivos, somos una asociación que intentamos siempre dar cabida a todo el mundo. Tenemos niños muy diversos, con ciertas dificultades y para nosotros es una familia. Nosotros no nos ponemos objetivos, nuestro objetivo es que los niños se formen, pero que sobre todo aprendan otras cosas, valores como la tolerancia, el respeto o el trabajo de equipo. Conseguir formar grupos, formar una piña, donde lo importante no es solo aprender coreografías y contar pasos sino otras cosas como animarse entre ellos o el trabajo en grupo es lo importante.

-¿Cree que se están rompiendo estigmas en cuanto a la danza también aquí?

-Por supuesto que sí. De hecho, nosotros lo vemos cada año. Cuando empezamos a bailar solo había dos niños bailando, y ahora en uno de los grupos ya son mitad niños y mitad niñas. Cada vez tenemos más niños anotados y para nosotros es un logro romper ese estigma, eso de pensar que un niño no puede o no sabe bailar, de hecho el mejor bailarín en Stars Dance fue un niño. Y eso es una motivación, porque se escucha todos los días que los niños no bailan porque es cosa de niñas, y es triste.

-¿En un futuro se podrá ver un bailarín lalinense en la fama?

-Puede ser. De hecho una alumna, Sonia Troitiño, está ahora bailando con Sebastián Linares, un coreógrafo muy importante en España. Compite con la escuela No Limits de Narón. Pero eso depende también de los gustos de cada alumno.

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