El Concello de Lalín ha remitido a la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio una solicitud para que proceda a la suspensión temporal de los permisos de corta en la zona de afección del entorno ecológico de la Fraga de Catasós, hasta que se resuelva el expediente del plan de conservación del monumento natural. La petición se formula tras ser remitidas alegaciones al documento preliminar del plan para la Fraga de Quiroga, en las que el gobierno incluye la ampliación de su área de protección.

En concreto, el Concello demanda en sus aportaciones la ampliación de la protección a la zona clasificada por el Plan Xeral como suelo rústico de especial protección de áreas de interés paisajístico y de suelo de especial protección forestal, así como la ampliación al espacio natural lindante que está en proceso de aprobación para la creación del ENIL de la Fraga de Casas Vellas, y que se une con este espacio por el corredor ecológico formado por el Rego de Quintela, alcanzando así una superficie protegida aproximada de 135 hectáreas.

La edil de Medio Ambiente, Celia Alonso, justifica así la alegación: "No entendemos que el plan de conservación publicado por la Xunta simplemente contemple la protección del monumento natural sin proteger su entorno, aspecto imprescindible debido a la interacción con los sistemas biológicos presentes en él, como flora y fauna, que también comparten los espacios periféricos en donde la pérdida o degradación de estas zonas repercutiría directamente en la Fraga de Quiroga, ya que forman una unidad biológica". Por eso, desde su departamento solicita la suspensión temporal de los permisos de tala expedidos por la Xunta en la zona de afección hasta la resolución definitiva de las alegaciones, "con el fin de salvaguardar la supervivencia de los árboles singulares, especialmente robles y castaños, ya que, de seguir realizando cortas, se puede perder biodiversidad".